Coscomatepec, Ver.- Ariel Segura Medina es profesor de educación física, futbolista y pintor, una mezcla de talentos que van desde el dinamismo en la actividad física hasta expresar esa energía por medio de pinceles y lienzos, en donde la pintura y el color hacen de la cotidianeidad una obra de arte.
Convencido de que el arte plástico, la pintura y en concreto el muralismo es una actividad que debe ser compartida con toda la población, el profesor decidió elaborar murales en lugares públicos, como el que hoy se puede apreciar en la calle Mariano Jiménez del centro de Coscomatepec, el cual realizó gracias a la fotografía de MarLu y la gestión de Zair Monroy.
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“Para mi habría sido muy fácil pintar un león o un carro o algo, pero no se trataba de eso, se trataba de contribuir a la historia y al patrimonio cultural del pueblo para que también la gente se haga partícipe de los murales y se haga partícipe de ellos y los cuide”, expresó el artista, que señala continuará con esta misma línea realizando más obras con temas como el trueque, los oficios, la talabartería, la enfermería, el magisterio y otras actividades que se realizan en la localidad.
Más de 31 metros cuadrados de color en donde la tradicional plaza de los lunes con sus toques de folclore y realidad, quedan plasmados en una pared que inmortaliza un momento típico que se vive cada semana en este pueblo mágico, un mural que ahora es un referente de la cultura del lugar y que en la firma lleva el nombre del profesor Ariel Segura.
¿Cuáles fueron sus primeros acercamientos con la pintura?
Originario de Xalapa, cuando Ariel tenía cerca de 3 años recuerda ya tenía la inquietud por pintar y crear dibujos, su mamá le cuenta que mientras miraba las caricaturas dibujaba, un lápiz y un papel eran sus grandes aliados para comenzar a bocetar lo que hoy ya son grandes obras de arte, producto de la experiencia.
Con perseverancia, insistencia y el gusto por las artes, el profesor ha llegado a perfeccionar distintas técnicas gráficas durante más de 35 años, que hoy se ven reflejadas en las calles donde los murales tienen su firma y dejan en claro su gran talento que va más allá de un dibujo, son mensajes que invitan a la población a pensar y admirar la belleza de la realidad.
Más que una profesión la pintura se convertiría en un pasatiempo, una actividad que realiza por pasión, no por obligación, más bien amor al arte.
Fueron dos ocasiones en las que realizó examen para estudiar artes sin embargo al mismo tiempo el examen de la normal sería quien lo eligiera para seguir su carrera profesional y hoy es profesor de educación física, “creo que la docencia es un trabajo que me ha dado mucha satisfacción y mi persona ha crecido en todo y hoy veo la pintura como un momento de esparcimiento que intento compartir con los niño y más personas, ambas se han complementado muy bien”, explica.
Fue en el año de 2007 cuando llega a vivir a Coscomatepec, debido a que su plaza como maestro demandaba dar clases en una escuela de la comunidad de Zacatla, hoy se encuentra en Alpatlahuac dando clases, “desde el 2007 hasta la fecha he vivido en Cosco, es un lugar que ha tenido una parte muy emotiva dentro de mi vida, son 15 años que he estado ahí y ya he pintado en otras escuelas de la región, pero me faltaba pintar en Cosco para poder aportar algo a la comunidad”.
Su próxi,mo proyecto es montar una exposición en el mes de mayo con el tema de la maternidad y en general todo el aspecto femenino que es un tema que captura su atención, asímismo busca seguir acercando a las personas al arte y combinando su profesión con su pasión por la pintura.
Nota publicada en El Sol de Córdoba