Zongolica, Ver.- El Maestro Reynaldo Zavaleta Colotl presentó el libro “Imaginario, manos y flores: Patrimonio cultural náhuatl de la sierra de Zongolica”, que es un registro visual y narrativo que busca preservar y proteger el patrimonio cultural inmaterial de los hombres y mujeres de la Sierra de Zongolica.
El proyecto, dijo, se realizó con el programa de apoyo a las culturas multilingües y comunitarias. Fue posible también, gracias a las aportaciones que las mujeres y hombres nahuas hacen y, sirven como soporte.
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Resaltó que las prácticas tradicionales son parte de un legado milenario del que se carece de documentación. Este libro busca coadyuvar en la preservación de la memoria de los pueblos y la defensa de los derechos culturales del patrimonio cultural inmaterial, al mismo tiempo de propiciar diálogos interculturales que permitan fortalecer esos conocimientos
“Tiene un contenido de 3 expresiones artístico-culturales: los arcos florales de cucharilla, que se realizan para hacer ofrendas; el trabajo de la alfarería de barro y el trabajo del arte textil”, señaló.
Explicó que el tejido textil, de telar de cintura, de lana y algodón es característico del municipio de Tlaquilpa. Es un trabajo artesanal que tiene varios procesos. El hilado con malacate es una técnica que se aplica con las manos y que forma parte del imaginario flores y manos.
"Los tintes y pigmentos naturales de origen vegetal, animal y mineral se han ocupado desde la época prehispánica, para el teñido tanto de algodón como lana”, añadió.
¿Cuál es la importancia de la cerámica?
La cerámica es arte alfarero que se descubrió desde el origen de la humanidad, en las sociedades aldeanas que descubrieron esas tecnologías mediante la manipulación del barro para convertirlos en utensilios útiles, basados principalmente en las formas de las calabazas.
Y los arcos florales hechos con cucharilla son la expresión cultural que elaboran hombres artesanos con especial dedicación en las fiestas patronales en los municipios, principalmente de la zona serrana.
La presentación oficial se hizo en el Centro Coordinador de Pueblos Indígenas del Inpi, donde estuvieron presentes artesanas y artesanos, así como las mujeres que forman parte del proyecto; entre ellas las tejedoras textiles, Carmela y Narciza Tenzohua, ambas del municipio de Tlaquilpa; y Abelina Pérez y Luisa Martínez, alfareras de Atlahuilco.