Dolores "Lolita" Hernández Monzón tras su concentración en la burbuja de seguridad anti-coronavirus, en el Centro Nacional de Alto Rendimiento (CNAR), en la Ciudad de México, está con la mira puesta en su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, a realizarse del 23 de julio al 8 de agosto.
Previo a la justa olímpica, la deportista, en exclusiva para Diario de Xalapa y vía telefónica platicó parte de su rutina diaria en conjunto con su entrenadora Ma Jin, con quien trabaja desde hace una década y cómo fue sin distracciones y con todo lo que exige la disciplina deportiva de ser clavadista.
Para quienes se preguntan cómo es su actividad, Lolita comparte parte de su itinerario: inicia con un desayuno ligero a las 8:00 de la mañana, luego se dirige a la alberca a trabajar en un horario de 09:30 a 13:00 horas. Una vez concluido este entrenamiento, come y descansa un rato y a las 16:30 horas continúa perfeccionado sus clavados hasta las 19:00 horas.
Dijo que al concluir el programa se retira a cenar y finalmente descansa, para continuar al siguiente día.
Eso sí, los domingos no hay trabajo, por lo que se relaja escuchando música pop, viendo un poco de televisión y finalmente dormir.
En este momento Lolita se encuentra motivada y fuerte, porque recuerda la operación de su espalda que la mantuvo en peligro, de la que logró salir exitosamente.
“El año pasado antes de competir en un nacional, me intervinieron quirúrgicamente en la columna. Fue bastante difícil para mí la recuperación, porque fue un poco larga”, nos dice Lolita Hernández vía telefónica.
Y agregó: “Al enterarme me asusté un poco, porque nunca me habían operado y me dijeron que era completamente necesario, porque estaba en peligro mi movilidad, por lo que se tomó la decisión de hacerla pronto y se evitó algo que pudo ser peor”, recordó.
Tras este este hecho, “me siento bien y me demostré a mí misma que puedo con cosas muy difíciles y por lo tanto estoy motivada, porque pude salir de ese problema y creo que puedo salir de problemas más difíciles”, puntualizó.
El camino de la clavadista es amplio y con recuerdos que siguen en su mente, como el que vivió en Juegos Panamericanos Lima 2019, en donde logró la medalla de plata.
“Los Juegos Panamericanos, fue una súper experiencia, porque acababa de entrar en una lesión y tenían pocas expectativas en mí. Creo que eso me quitó presión, pero igualmente me ayudó a sacar la casta y tener una buena actuación que terminó en medalla de plata y logrando la plaza olímpica para el país”, comentó la deportista.
Lolita expresó que una sensación de felicidad siguen en su corazón es al ver el gran apoyo de la gente hacia ella y más cuando logra un metal para México, porque dice: “Se siente muy padre ver la bandera de México. El subir al pódium con mexicanos alrededor, aplaudiéndote y echándote porras, es algo muy padre y motivante que me impulsa a seguir buscando resultados positivos para el país, por eso día a día me preparo para conseguirlo”.
Dolores Hernández agradeció a las personas que siempre han estado con ella a pesar de cualquier circunstancia y que sus logros van dedicados ellos, así como a su familia, hermano y entrenadora.
Indicó que piensa positivamente y que la palabra fracaso no está en su mente, sino experiencia y aprendizaje.
Para concluir dijo: “Gracias a las personas por siempre estar apoyando. Espero tengan una satisfacción al ver mi competencia en Tokio y pues siempre será un orgullo representar a Veracruz y México”.