Córdoba, Ver.- Los dos espacios deportivos que son un icono en la ciudad están en el abandono, se trata del estadio de futbol, Rafael Murillo Vidal y el Beisborama 72.
Es un problema que se viene arrastrando desde hace varias administraciones municipales y no es novedad que no reciba mantenimiento o que sean usados para todo menos para lo que fueron construidos lamenta Irving Tress García, exbeisbolista profesional y director de un equipo de beisbol amateur.
En el caso del Beisborama fue construido en 1972 por el arquitecto Genaro Schettino, hace ya 52 años, sin embargo dejó de usarse desde hace más de 15 años para este deporte tras señalar según expertos que tiene fisuras en su estructura y por lo tanto es un edificio en riesgo, así lo marca el dictamen de Protección Civil.
Actualmente se usa para ferias y bailes o conciertos, solo en la parte del campo, las gradas están cerradas.
¿Cuál es el estado del los campos Murillo Vidal y Beisborama?
Ante ello, los deportistas como Irving Tress, añoran que haya una obra que reactive al rey de los deportes, pues como director de un equipo señala que sí es rentable que se tenga un estadio de nivel profesional.
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El histórico Beisborama luce sin mantenimiento, lleno de humedad, polvo, basura, las luminarias fueron retiradas y vendidas como chatarra, el diamante dañado completamente pues hay juegos mecánicos en el área.
Otra historia es el estadio Rafael Murillo Vidal, ubicado en el mismo cuadrante, no tiene energía eléctrica por lo tanto no puede ser usado de noche.
Los vestidores sucios, viejos y sin mantenimiento aunque sí se usa para partidos de futbol semiprofesional y amateur.
Aquí se cobra la entrada que depende de la Liga es de cinco y hasta 20 pesos por persona, además del estacionamiento, hay venta de alimentos y bebidas alcohólicas, pero nadie le invierte pues se echan la culpa entre particulares y autoridades.
Así como este espacio hay otros en peor situación como el gimnasio San José, El Mexicano y Arena Córdoba, sin mantenimiento y se han ido quedando obsoletos porque de acuerdo a los deportistas, a las autoridades no les interesa tenerlas en buenas condiciones.
Publicado originalmente en El Sol de Córdoba