Los reflectores en Pumas están al cien. Como ESTO lo adelantó en su edición de ayer, la llegada de Raúl Gudiño a la portería felina es inminente. Es por ello que las miradas se posaron en la Cantera universitaria y en Alfredo Saldívar, actual guardameta auriazul.
Sin embargo, el joven mexicano no se detuvo a su salida de Cantera para hablar con los medios de comunicación. Esbozó sonrisas y saludos, pero no emitió declaración alguna.
David Patiño hizo lo propio, mostró un semblante amable al salir de las instalaciones universitarias, pero no lanzó ninguna palabra a los micrófonos.
La misma rutina adoptó el resto del plantel. Si bien el ambiente entre futbolistas es cálido y se percibe buena comunicación dentro del grupo, no emiten ninguna voz al exterior.
Y es que la obligación en Pumas es enderezar el barco de cara a la campaña entrante, pues terminaron muy mal en el Apertura 2017. Los cambios en el timón causaron duras repercusiones. Los números negativos acompañaron a Juan Francisco Palencia y Sergio Egea, quienes también terminaron con la paciencia de la directiva auriazul y terminaron por ser cesados.
Hoy los bríos se renuevan con las incorporaciones de Alustiza, Arribas y Asprilla, quienes llegarían a complementar un cuadro juvenil que está en vías de trascender. No obstante, detrás de ello existe una enorme historia de éxitos y personajes que dieron garra y esfuerzo en cada uno de los partidos. Pumas debe apegarse a ello.