Xalapa, Ver.- “La población tiene resistencia a la ciencia, prefiere seguir las creencias, lo que le dijo un vecino, un familiar, en lugar de confiar en los datos científicos. Actualmente hay mucha información, pero hace falta aprender a discernirla y analizarla”, indica Jaime Landa Lozano, médico cirujano y docente de Telesecundaria.
El médico asignado a Hospital Covid en Xalapa señala que en la actualidad no se puede decir que hay falta de información, porque está en todos lados.
Leer más: Ciencia y biología enseña a los jóvenes a enfrentar su entorno
“Lo que nos ha afectado es cómo se ha dado el desarrollo del conocimiento. La cultura que nosotros tenemos es que preferimos creer en lo que los demás nos comentan que en lo que la comunidad científica nos ha podido demostrar. Muchas personas cuando acuden a valoraciones con personal de salud lo primero que dicen es ‘mi vecino, mi comadre, mi amigo me dijo esto…’ y prefieren creer eso a la información que está en muchos lugares. Nos resistimos a la ciencia que es la que nos ha demostrado qué es lo que deberíamos hacer”, indica Landa Lozano.
Agrega que para poder crear una conciencia con base en la ciencia se necesita leer, acercarse a los datos y verificar las fuentes de información.
“Estamos en una era de información y está por todos lados, pero es crucial que nosotros sepamos clasificarla: ¿de dónde viene?, ¿quién la está otorgando?, ¿quién es confiable?, ¿quién puede tener cierto interés en que se difunda o no? Las personas tienen que analizar lo que están leyendo y con esta información obtenida van a desarrollar un mejor conocimiento que lo van a poder aplicar en su vida diaria, tanto en temas de salud como en general en otros aspectos”, agrega el docente.
Educación es crucial
Al respecto, señala que la educación y el papel de los docentes es fundamental para abonar a que las personas se acerquen y confíen en la ciencia.
“El profesional de la educación tiene un papel como difusor de la ciencia. La educación es una puerta para entrar al núcleo familiar, porque los temas que se les da a los estudiantes terminan siendo comentados en una comida familiar, en la sobremesa, a la hora del café”, señala.
Landa Lozano considera que sí hay un compromiso serio entre los educadores: “le apuestan a un cambio de mentalidad, al desarrollo de la conciencia de la persona; como profesionistas de la educación tenemos un impacto en nuestros alumnos; todo aquello que les compartimos va generando su conciencia, su conocimiento; así que todo lo que hagamos ahorita en educación repercutirá a futuro”.
Asevera que es la educación la que ayudará a ese cambio de mentalidad que se requiere en la población para que pueda ser más analítico y tomar decisiones más adecuadas.
Asumir responsabilidad ante el Covid
Respecto al inicio presencial de clases para educación básica, indica que en su centro de trabajo siguen las medidas que son dictadas por la SEV para reducir la posibilidad de un contagio. Por lo que llama a madres y padres de familia a asumir su responsabilidad al respecto.
“Los padres tienen todo el derecho de estar preocupados sobre si es riesgoso llevar a los niños a la escuela, pero también deben asumir la responsabilidad de los niños y los adolescentes, ya que ellos no tienen la capacidad de tener un juicio correcto sobre los riesgos del virus; los padres son los responsables y no deben exponerlos porque los niños no toman las decisiones de ir a un restaurante o lugar concurridos, esa decisión la toman los padres, entonces eso es lo primero, invitar a los padres a tomar su responsabilidad”, señala el docente de telesecundaria.
Agrega que también es necesario construir una cultura de la prevención de la salud, que no sólo tienen que ver con la pandemia, sino con cuidados generales.
“Son cuidados generales básicos de higiene y salud: alimentación, protección de su persona, no exponerse al daño, medidas de prevención higiénico como lavado de mano, baño diario, cepillado de dientes; todo esto es básico y esencial y debe reforzarse”, añade.
Explica que con el Covid muchas de estas medidas comenzaron a usarse cotidianamente, lo que repercutió en que otras enfermedades bajaran, lo que es muestra de lo importante de mantener buenos hábitos de higiene.
Propósito, mejorar la salud
Finalmente, en el marco de un inicio de año que suele ir cargado de nuevos propósitos, llama a sumar a la lista adoptar medidas de salud adecuadas.
Entre las principales recomendaciones enlista seguir una dieta saludable, desarrollar buenos hábitos como tomar agua, ingesta de frutas y verduras, disminuir los carbohidratos. “Hay que tener un especial cuidado en la alimentación porque es el pilar para la salud de las personas”, indica.
También llama a mantenernos físicamente activos, salir a alguna área verde donde podamos ejercitarnos, participar en las campañas de vacunación, disminuir el consumo de sustancias nocivas como el tabaco o alcohol; aprender a gestionar el estrés, mantener una buena higiene del cuerpo y de la mente, además de tener revisiones médicas periódicamente.
“Deben ser muy observadores con su cuerpo, si notan algún cambio que se acerquen a una valoración médica para que se detecte a tiempo alguna situación y se puedan ejercer acciones para que no se vaya a complicar”, aconseja Landa Lozano.