Llega septiembre y con él, el Mes de la Patria. Las calles y parques principales se llenan de adornos tricolores y se respira un espíritu de unidad nacional.
Es mucho lo que nos identifica como mexicanos, y esta construcción social se ha ido delineando y fortaleciendo a lo largo de los años, tantos, que incluso hay ideas muy arraigadas, pero que pocas veces nos detenemos a pensar en su origen, y así ocurre con uno de los símbolos del país más respetados y queridos: la Bandera Nacional.
¿Cómo debe ser la Bandera Nacional?
Desde pequeños nos enseñaron los colores de la bandera mexicana, el significado de cada color e incluso por estas fechas de septiembre es común que en las escuelas las niñas y niños elaboren algunas con papel de china para las celebraciones.
Pero, ¿cómo sabemos que así debe ser nuestra bandera? Esto es porque hay una “Ley Sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales”, en la cual se describe que la Bandera Nacional consiste en un rectángulo dividido en tres franjas verticales de medidas idénticas, con los colores en el siguiente orden a partir del asta: verde, blanco y rojo.
La Ley especifica que en la franja blanca y al centro, va el Escudo Nacional, con un diámetro de tres cuartas partes del ancho de dicha franja. La proporción entre anchura y longitud de la bandera, es de cuatro a siete. La bandera puede llevar un lazo o corbata de los mismos colores en la punta de la lanza que porta el lienzo.
¿Significado de los colores de la bandera han cambiado?
Los colores de la bandera no siempre han significado lo mismo; pues tienen una profunda relación con el estandarte guadalupano que usó Miguel Hidalgo cuando se levantó en armas con el pueblo en 1810.
Aunque los colores han sido verde, blanco y rojo, en 1821 significaban: blanco, la religión católica; el verde, la independencia de México ante España y el rojo, la igualdad y la unión de los mexicanos con los españoles y las castas.
Con el paso de los años y las transformaciones sociales y políticas que se fueron dando, cuando Benito Juárez llegó a la presidencia se dio la separación del estado con la iglesia, y los colores cambiaron a: verde, esperanza; blanco, unidad, y Rojo, la sangre de los héroes nacionales.
Bandera Nacional es de todos, pero con respeto
Sin duda la Bandera Nacional nos da identidad como mexicanos, a tal grado que muchos expresan su cariño y no falta celebración en la que no se hondee con fuerza.
Te puede interesar: Lista la cartelera para las fiestas patrias en Camerino Z. Mendoza y Río Blanco; te contamos
Los símbolos patrios son tres: el Escudo, la Bandera y el Himno Nacional, y cada uno debe ser respetado y rendirles homenaje; por lo que existen diversos protocolos que son acatados, incluso, sin que lo sepas y que constan en la “Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales”, que entró en vigor el 24 de febrero de 1984.
De entre los artículos por ejemplo se rescata que los honores a la Bandera Nacional se harán primero antes que a cualquier persona sin importar su cargo.
En festividades cívicas o ceremonias oficiales en que esté presente la Bandera Nacional deberán rendírsele los honores que le corresponden en los términos previstos en la Ley, que pueden consistir, por ejemplo, en el saludo simultáneo de los presentes.
La población puede usar la Bandera Nacional en sus vehículos, exhibirla en sus casas o trabajo; puede ser de cualquier dimensión, pero con el escudo impreso en blanco y negro.
Así que si en estas fiestas patrias están pensado en los adornos y atuendos tricolores, recuerda que la Bandera, Escudo e Himno Nacional merecen todo nuestro respeto.