Xalapa, ver.- Provocan un gravísimo daño ambiental quienes lanzan diversas sustancias a las nubes para disiparlas, porque modifican el clima local de las zonas donde realizan esas prácticas, expone el meteorólogo Antonio Luna Díaz Peón, investigador del Centro Universitario Bonpland y Humboldt en el doctorado en Ecología y Gestión Ambiental.
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El especialista detalla que, meteorológicamente hablando, el dispersar las nubes lo único que logran es hacer un cambio del clima del lugar. “En investigaciones que hemos hecho en México y específicamente para Veracruz, se elaboró un proyecto de humedad atmosférica entre la costa y el Valle de México y se detectó que es precisamente el Valle del Cofre de Perote donde se concentra la humedad marítima. Ahí se deposita, no necesita siquiera que llueva para que se quede ahí”.
Un ejemplo contrario, dijo, es lo que sucede en Monterrey, Nuevo León donde el gobierno bombardeó las nubes con yoduro de plata, que es un compuesto químico utilizado para provocar la precipitación de lluvia, “y sí llovió pero en Coahuila”. “Si se provoca el cambio meteorológico y eso es grave porque ya no se deja actuar a la naturaleza”.
La verdad es que estos proyectos de tratar de dominar la atmósfera lo único que terminan siendo son fracasos, dijo y añadió que en esos casos, la repercusión meteorológica es grave porque cambian patrones naturales “y es una tontería lo que hacen”.
“Hay que entender que si alguien evita que haya lluvia en un sitio de dónde Xalapa trae parte del agua que consumen sus habitantes, lo único que pasará es que después ya no la tendrás de ese sitio”
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Así, que resaltó el gravísimo daño que se provoca al medio ambiente el lanzar químicos para inhibir la lluvia porque se altera el clima local y eso ya se dijo a través del Panel Intergubernamental del Cambio Climático eso será drástico para el planeta y la ONU prohíbe todo ese tipo de cosas, “pero es obvio que los países no le hacen mucho caso a sus disposiciones”.
En el caso de México si quiera realmente seguir apostándole a cuestiones del cambio climático tiene que prohibir todo este tipo de cosas, concluyó.
Los lanzadores son aparatos industriales
El comisariado ejidal de Totalco, Pedro Romero comenta que los lanzanitrógeno son artefactos industriales de grandes dimensiones que lanzan a presión la sustancia que al elevarse se dispersa en las nubes y las disipa.
Como autoridad en la región, explica que hallaron uno de estos aparatos en un predio de un rancho llamado Sabino huérfano.
Realmente desconoce en dónde compran estos aparatos, porque se nota que no son caseros, sino una maquinaria industrial. De su costo no se pudo saber en dónde los consiguen o los fabrican.
Nota publicada en El Sol de Córdoba