ORIZABA, Ver.- Con demostraciones de lo que aprendieron, niñas y niños que participaron en los talleres del DIF expusieron dibujos, danzas y bailes. Así concluyeron los cursos de verano que se impartieron en varias sedes de la ciudad. Ahora comienzan a prepararse, pues el 26 de agosto comienzan las clases del nuevo ciclo escolar 2024-2025.
El presidente del DIF, Hugo Chahín Kuri, agradeció a los padres de familia porque sus hijos reforzaron conocimientos en la biblioteca y, otros, disfrutaron de deportes en los complejos Norte y Sur.
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Recordó que las vacaciones escolares significan alegría para la comunidad estudiantil, pero en esta ocasión la niñez y adolescentes del valle de Orizaba asistieron a los cursos, dejando sin preocupación a los padres de familia que tuvieron que seguir trabajando.
“Durante tres semanas cuidamos a los hijos de mamá y papá, asistieron a los cursos de verano que fueron diseñados para ofrecer entretenimiento, diversión y, en algunos casos, educación o regularización en algunas materias escolares”, abundó.
Expresó que se brindó a las niñas y niños la oportunidad de desarrollar destrezas y habilidades, socializaron e interactuaron con niños de su misma edad en un ambiente protegido y seguro.
En los complejos deportivos se diseñó un programa donde jugaron y ejercitaron en atletismo, basquetbol, natación; mientras en otras sedes, los adolescentes desarrollaron habilidades manuales, visitaron parques y museos, subrayó.
“Los pequeños participantes en los cursos estuvieron a cargo de maestros e instructores de diferentes disciplinas”, detalló.
Así, explicó, los adolescentes lograron fortalecer los lazos familiares con tiempo de calidad y pusieron en práctica la creatividad para generar diferentes momentos juntos.
Padres fueron testigos de lo que aprendieron sus hijos al asistir a la muestra de fin de cursos que se realizó en el Centro Convenciones Orizaba (COCO), donde las niñas y niños presentaron dibujos, carteles y bailaron junto a mamá y papá.
Apuntó que los peques que asistieron a la biblioteca o al curso de computación continuaron con el hábito del estudio en un ambiente de sano esparcimiento, donde aprendieron jugando.