Orizaba, Ver.- La Rectoría de nuestra Señora del Carmen que se ubica en el Centro Histórico de Orizaba Pueblo Mágico es uno de los templos debajo del cual hay vestigios de los túneles que conectaban a las iglesias del Valle de Orizaba.
Juan de Dios Sánchez González, quien está a cargo de la oficina en ese templo, cuenta que la fecha exacta de cuándo se hicieron los túneles se desconoce, pero sí que comenzó con los problemas más frecuentes de la historia reciente de México, cuando comenzó a formarse como país.
En la Independencia la mayoría de los templos que fueron construidos por los españoles fueron saqueados y se prohibió el culto, por lo que los sacerdotes tenían en los túneles, lugares accesibles para poder escapar y entrar.
De manera más radical con las Leyes de Reforma de Benito Juárez, cuando se separó la Iglesia del Estado comenzó la persecución de manera más fuerte contra los sacerdotes y también contra los españoles, por lo que se continuaron utilizando.
En el México independiente, los túneles, aparte de colindar con todos los templos de la región, tenían acceso a algunas casas.
Señaló que en el tiempo de la Revolución muchos templos fueron convertidos en cuarteles, el convento de San Juan de la Cruz, adjunto a la Rectoría del Carmen, fue uno de ellos y por eso, por ahí había acceso a los túneles.
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Durante el gobierno de Plutarco Elías Calles se ocuparon más estos pasajes. Recordó que durante la estancia del santo obispo Rafael Guízar Valencia en estas tierras, donde hizo misión, al estar prohibidas las manifestaciones de culto públicas, había unos 10 sagrarios ambulantes, que se instalaban en casas de familias acomodadas y religiosas, para oficiar en esos lugares la misa de manera clandestina y, se accedía a ellas a través de esos conductos subterráneos.
Túneles de iglesias conectaban con casas
Por eso, agregó, muchos vestigios de túneles se encuentran en viviendas que tienen entradas de acceso, pero las familias que ahí habitan prefirieron cerrarlas y, al hacerlo esos pasajes se perdieron.
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El túnel que está debajo de la oficina de la Rectoría de nuestra Señora del Carmen es uno de los más grandes, en la cafetería de las oficinas de la Curia Diocesana, también hay un acceso.
“Ahí, cuando encienden la luz se ve cómo el túnel se va como rumbo a Santa María de los Servitas o el Calvario, donde hay otro, más pequeño debajo de la Sacristía”, y tiene una entrada parecida a la del Carmen.
Señaló que algunas personas que llegan a la oficina de esta rectoría comenta, que en viviendas que están atrás de la Parroquia de San Juan de Dios también hay túneles, pero los cerraron porque colindaban con otras viviendas y, en estos tiempos, por seguridad, los cerraron.
Túnel, abierto a la población
En el templo del Carmen el acceso al túnel está abierto a la población en general en horario de oficina de 10 a 2 de la tarde y de 4 a 7 de la tarde.
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La puerta para acceder está dentro de la oficina de la Rectoría. El pasadizo es amplio y para bajar a él se tiene que descender por una corta escalinata con peldaños altos y angostos, que muestran el paso de muchos años.
Quienes quieran bajar y observar los vestigios del túnel deben tener buena salud, no es recomendable para quienes tienen claustrofobia, problemas de presión o respiratorios, pues hay mucha humedad.