Orizaba, Ver.- En el Pueblo Mágico, las familias comenzaron a colocar el Nacimiento bajo el árbol de Navidad, una tradición que se hereda de padres a hijos, dijo el cronista de la ciudad, José Luis Reneaum Alcocer.
Luego de que pasaron las fiestas guadalupanas y en la víspera de las posadas, la gente prepara el lugar donde instalará el Belén, recordó el entrevistado.
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Expresó que por ser el motivo principal la celebración del Nacimiento del Niño Dios, ésta es una de las figuras que no pueden faltar, aunque hay una fecha específica para colocarlo.
“Al haber sido alumbrado por la Virgen María en un pesebre de Belén, en la decoración no solo se incluye a la virgen, sino a los pastores y a los tres reyes magos que llevaron sus ofrendas”, relató.
Describió que junto al pesebre también debe estar san José y, en algunas ocasiones se incluye tanto a un ángel como un diablo, además, no pueden faltar animales como el buey y la mula, que son los que dan calor al Niño recién nacido.
Aparte de que también se incluye en el Nacimiento a los pastores con sus ovejas, camellos y algunos animales de granja.
Reveló que, dependiendo del tamaño del Nacimiento, también se pueden agregar una estrella de Belén e incluso una choza. Algunas personas lo ponen debajo del árbol de Navidad, pero en realidad no hay limitantes, por lo que se puede colocar en el espacio que se acomode mejor a sus necesidades.
“Aunque las personas tienen la libertad de colocar el nacimiento el día que mejor se les acomode, muchas lo hacen desde el 8 de diciembre, que se celebra el Día de la Inmaculada Virgen de la Concepción”, abundó.
En esta fecha se hace un espacio en las casas o incluso en las oficinas y escuelas, para colocar el Nacimiento y pueda ser visto en Navidad; pero en esos días no se coloca al niño Dios, sino solo a las figuras centrales, que son María y José, junto con el resto. El niño Dios se coloca en las primeras horas del 25 de diciembre.
Para saber:
Según la tradición, el Niño Dios o Jesús de Nazaret nació el 25 de diciembre, de ahí que en esa fecha se celebre la Navidad.
Por eso, en las últimas horas del día 24 o en las primeras del día 25 de diciembre, muchas familias arrullan al niño Dios para después ser colocado en el pesebre y con ello representar su nacimiento.
Sin embargo, al haber “acabado de nacer”, el niño Dios no se viste, sino hasta el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
