De acuerdo con el reporte “Doing Business 2018: reformando para crear empleos”, del Banco Mundial (BM), México descendió dos posiciones al colocarse en el lugar 49 de 190 naciones en el ranking de facilidad para hacer negocios, el cual mide las regulaciones que favorecen o restringen la actividad empresarial.
El país tuvo una mejora en el rubro de acceso a la electricidad al aumentar su calificación a 70.99 puntos desde 68.18 unidades obtenidas en 2017, con lo que se coloca en la posición 93 en este rubro.
Se presentó un retroceso en registro público de la propiedad al ocupar la posición 99; en pago de impuestos ocupó el sitio 115, al registrar una nota de 67 puntos; y resolución de insolvencia. Se mantuvieron sin cambio: obtención de crédito, protección a inversionistas minoritarios, comercio transfronterizo y cumplimiento de contratos.
El documento destaca que México ocupó el primer lugar entre las economías de América Latina, y el segundo sitio regional en el número de reformas de su clima de negocios para la generación de empleos, la atracción de inversiones y el aumento de la competitividad.
En la regulación de México hay aspectos positivos como en el indicador de obtención de crédito en el que el país se colocó en el sexto lugar, gracias al registro minucioso de un buró de crédito que facilita tener información para un agilizar el otorgamiento de créditos y bajar las tasas de interés.
También mejoró su posición en el proceso para arrancar un negocio, con un tiempo de 8.4 días.
Finalmente, los primeros cinco mejores países para hacer negocios en el mundo son: Nueva Zelanda, Singapur, Dinamarca, Corea del Sur y Hong Kong.
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