Hace precisamente dos décadas el gobierno de los Estados Unidos de América enfrentaba uno de los casos más escandalosos de su historia: el presidente Bill Clinton, de entonces 49 años, era culpado de tener relaciones sexuales con una becaria de la Casa Blanca, Monica Lewisnky de 22 años en ese tiempo.
Este hecho causó gran revuelo no sólo en el país vecino, sino alrededor de todo el mundo mientras se seguía el proceso de destitución de Clinton por perjurio, tras haber declarado que él no había mantenido relaciones sexuales con Lewiwnsky y posteriormente ser desmentido tras presentarse una prueba que incluía una mancha de su semen.
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Este argumento será el eje que guíe ahora el proyecto Impeachment, titulo de la serie de FX que retomará este caso para ser llevado a la televisión en el marco de la antología American Crime Story, producida por Ryan Murphy y que estrenará su tercera temporada en septiembre de 2020 con esta historia.
La gran novedad es que la propia Monica Lewinsky fungirá como parte del equipo de producción, lo cual le permitirá tener cierto control sobre el relato de la historia, según informó EFE.
Esta será el tercer caso que retome la serie de American Crime Story, luego de recrear el caso de O. J. Simpson, que ganó siete premios Emmy, y el asesinato del diseñador Gianni Versace, que se llevó dos Globos de Oro, incluido el de Mejor Miniserie.
Aunque ahora no se han anunciado a los actores que darán vida a Bill Clinton o a su esposa Hillary Clinton, se informó que la actriz Beanie Feldstein hará el papel de Monica Lewinsky.
Además Sarah Paulson, quien ganó el Globo de Oro por interpretar a la abogada Marcia Clark en la primera temporada de American Crime Story, encarnará a Linda Tripp, quien fuera amiga íntima de Lewinsky y terminó revelando la relación oculta de la joven con Clinton. En tanto, Annaleigh Ashford hará el papel de Paula Jones, quien para ese entonces había iniciado una querella judicial por acoso sexual contra Clinton.
En declaraciones a la revista Vanity Fair, Lewinsky dijo que inicialmente tuvo dudas y estaba "un poco asustada de firmar el contrato" para la serie. “Pero después de una larga cena y conversación con Ryan (Murphy, el productor) entendí más claramente cuán dedicado está el a dar una voz a los marginados en todo su trabajo”, detalla EFE.
"Hay gente que ha estado apropiándose y contando mi parte de esta historia durante décadas (...) De hecho no fue sino hasta los años más recientes que yo he podido reclamar plenamente mi historia, casi 20 años más tarde", aseguró la exbecaria de la Casa Blanca.
"La oportunidad de producir la serie permite que las personas como yo, que han sido históricamente silenciadas, finalmente reintroduzcan su voz en la conversación", apuntó Lewinsky.
El escándalo
Antes de explotar el caso de Monica Lewinsky, Bill Clinton ya había sido señalado en 1994 por acoso sexual por la ex empleada de la Casa Blanca, Paula Jones, tras lo cual se inició un juicio en su contra.
En ese juicio, Lewinsky fue llamada a declarar, y bajo juramento negó haber tenido relaciones sexuales con el presidente Clinton. Sin embargo, Linda Tripp filtró una serie de conversaciones que tuvo con ella donde confesaba los encuentros íntimos que tuvo con el mandatario estadounidense.
Tras este hecho, Clinton dijo en un mensaje a la nación donde negó haber tenido relaciones sexuales con “esa mujer, la señorita Lewinsky”. Esta declaración fue desmentida luego de que medios como The Washington Post filtraran las conversaciones entre Lewinsky y Tripp, por lo que el fiscal independiente Kenneth Starr fue designado a investigar la relación de Lewinsky con Clinton.
Para el juicio le fue tomada una prueba de sangre al mandatario, que coincidió con una mancha de semén que quedó en un vestido de Lewinsky. Tras demostrarse esto, se trató de iniciar un juicio político en su contra por perjurio, pero fue rechazado por considerarse como un asunto personal y no político.
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