Que el quinto capítulo de la serie de Luis Miguel en Netflix llegara un domingo en el que se jugaba la final del futbol mexicano y también el segundo debate presidencial no impidió a los fans disfrutarlo y vaya que se llevaron una sorpresa.
Después de ver a un Luismi tierno, los dilemas que vivió por culpa de su padre Luisito Rey y de asimilar que la relación con su primer amor, Mariana Yaspek, terminó por malentendidos del corazón que involucraron a Alejandro González Iñarritú y Stephanie Salas, esta vez nos topamos con un giro de 180 grados.
La escena de sexo oral que nadie veía venir vaya que dio de qué hablar. De ahí en adelante todo fue sexo, alcohol y malas decisiones para aquella etapa del intérprete de "Culpable o no".
Con apenas 18 años, Luis Miguel vivió un escándalo pues fue grabado justo en el momento en el que despreció a una fan de nombre Fabiola y aunque el cantante estaba en un gran punto de su carrera, su equipo tuvo que limpiar este incidente.
Ahí inició la historia en pique: el manager de Luismi organizó un backstage y nadie supo cómo pero Fabiola resultó entre las elegidas para estar ahí. Luego se coló en un grupo de modelos y llegó de "contrabando" a la casa de Luismi.
Fabiola husmeó por la casa de "el Sol" y cuando casi la cacharon, se escondió en el clóset. Luego Luismi la encuentra y bueno, no se aguantaron las ganas.
Pero ahí viene lo mejor, él la invita a una disco y se van acompañados de "El Burro" Van Rankin. Todo era risas y diversión hasta que le entran a los arrancones con Palazuelos, el auto de "el Sol" termina en el mar de Acapulco y Fabiola casi muere ahogada.
Entonces para resumir lo que sucedió: Los contactos del equipo del cantante recurren a la Marina para ocultar el incidente mientras que el padre de la fan extorsiona a Luis Miguel y terminan cediendo.
Finalmente el cantante en su etapa de desenfrenó no midió las consecuencias por lo que Hugo, su manager, lo abandona.
Y en los flashbacks...
Por otra parte descubrimos que Timbiriche pudo ser el "culpable" de que Luisito Rey sospechara de una infidelidad de la mamá de Luismi.
Marcela Basteri en realidad solo diseñaba trajes para grupos infantiles sin ninguna mala intención de por medio. Los fans de inmediato los relacionaron con los exitosos niños.
También apareció Raúl Velasco y claro que el personaje seguirá para no olvidar darle a Luis Miguel su patadita de la suerte en sus pininos.
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