Orizaba, Ver.- Las abejas son polinizadoras indispensables para mantener el equilibrio de la biodiversidad, afirmó Ricardo Rodríguez Deméneghi, coordinador del programa Salvemos al Pico de Orizaba, quien invitó a la población a ayudar en la conservación de este insecto, que también resiente las consecuencias del cambio climático.
“Las abejas son el polinizador número uno a nivel mundial, hay otros hay otros como los murciélagos, las aves nocturnas y otro tipo de insectos, pero el número uno es la abeja”, resaltó y recordó que la polinización es el aceleramiento del proceso de fecundación de una planta.
Agregó que en el mundo vegetal es necesaria la existencia de polinizadores para obtener todo tipo de cultivos, no únicamente los agrícolas de sustento, sino cualquiera.
Desafortunadamente, la abeja ha sido atacada constantemente por los medios de erradicación de plagas. En la zona de Cuitláhuac, dijo, se realiza la fumigación aérea, que únicamente afecta a los insectos dañinos para un cultivo, sino que matan en su totalidad a las abejas.
“Los productores después dicen que no tuvieron cosecha porque no prendieron las flores”, apuntó y agregó que para que haya un fruto primero tiene que haber una flor y la flor es el receptáculo donde se hace la polinización, pero requiere la mayoría de los casos de un agente externo, es decir, las abejas.
Explicó que hay flores, por ejemplo, el Ave de paraíso, que tiene que ser polinizada a mano, eso es lo que incrementa su costo. “En la zona de Fortín tenemos varios campos de cultivo de esta planta y tiene que ser polinizada una a una y ese trabajo lo hacen las abejas”, resaltó.
Su importancia es tal, abundó, que todos los gobiernos en todo el mundo se unen en su defensa, por eso se nombró el Día Mundial de la Abeja, ya que dependemos de ella para tener equilibrio en todos los productos agrícolas.
Añadió que en la región se están dando cambios de cultivos, conocido también como movimiento de la frontera agrícola, es decir, que se actualmente hay cultivos que hace 40 años no existían porque no había las condiciones necesarias de condensación de humedad para tener el cultivo de limón, “para poder llevar a cabo ese proceso intervinieron directamente las abejas, que llevaron a cabo la polinización para la introducción de este nuevo producto en la zona”, señaló.
Las fronteras agrícolas se mueven por el cambio climático, que también afecta a estos insectos. “Ayer tuvimos una temperatura relativamente alta comparada con la registrada 10 años atrás y, nos estamos adaptando a esto. Por esa adaptación nadie se está preocupando de las abejas que están muriendo por golpes de calor y porque hacen las fumigaciones aéreas; si continuamos así nos vamos a quedar sin productos agrícolas, ya la disminución de cosechas es constante, pero no nos preocupamos porque la producción que no tenemos, la importamos.
¿CÓMO AYUDAR A LAS ABEJAS?
Para ayudar a las abejas podemos poner tapitas de agua azucarada en puntos altos, si tenemos la inventiva, podemos poner un bebedero de aves a donde también llegarán las abejas a tomar agua. Necesitamos aumentar su producción.
Podemos poner también, más flores en el jardín. Recurrir a la inteligencia ancestral de los abuelos, que tenían en sus casas una pared completa con latitas de aluminio llenas de tierra donde había plantas o flores, a las que llegaban las abejas.
Un tip que destacó es que donde hay abejas no hay moscos ni moscas. “Si tienes un panal en tu casa lo que haces es tirarlo; no lo hagas porque mientras esté no habrá moscos”.
La producción de miel en nuestra región se acabó, aseveró Rodríguez Deméneghi; “antes en los caminos rurales veíamos los cajones de colores que actualmente ya no vemos porque se acabó la miel y con ello las abejas. Además de que entre las mismas abejas hubo otra invasión, la de las abejas africanizadas, que tampoco se toma en cuenta”
ABEJAS AMENAZADAS A CAUSA DE LA DEGRADACIÓN AMBIENTAL Y URBANIZACIÓN
Las abejas son los principales polinizadores, lo que permite la reproducción de muchas plantas de importancia económica para la alimentación y otros aspectos de la vida, sin embargo se ven amenazadas a causa de la degradación ambiental provocada por el cambio de uso de suelo, por la intensificación de la agricultura, por la urbanización, por la fragmentación de hábitats, lo que genera un reto para el gran servicio ecosistémico del que nos beneficiamos todos, asentó la doctora Luciana Porter Bolland, de la Red de Ecología Funcional del Instituto de Ecología (Inecol).
Explicó que al ser Veracruz un estado donde se produce mucha miel tanto de Apis, la miel convencional, como de Meliponinos, abejas sin aguijón, éstas también se enfrentan al cambio de uso de suelo, degradación de hábitats, uso intensivo de agroquímicos, lo cual debe tomarse en cuenta en la proyección de cómo debe darse el desarrollo sustentable.
Veracruz es uno de los estados más importantes en la producción de miel de exportación, con el lugar cuarto o quinto, pero esa riqueza está amenazada por los procesos de intensificación de la agricultura, por la homogeneización de los paisajes y los cultivos transgénicos sobre todo en el norte del estado, advirtió.
El otro tipo de miel que se produce en el estado y que también tiene una gran importancia económica y biocultural es la que se produce por abejas nativas, Meliponinos, que se ve amenazada por los procesos de cambios de uso de suelos.
Los productos de la colmena son importantes para la atención de la salud, para la alimentación, pero también para las costumbres y para la generación de los recursos económicos porque hay muchos sectores del campo que dependen de la venta de miel, pero el uso de agroquímicos con fines de insecticidas empobrece muchas de las flores y plantas, donde las abejas pueden obtener el polen y el néctar, y por otro lado hay algunos agroquímicos que están diseñados para matar insectos, que eliminan a los dañinos pero también a los benéficos. “Se implementan esos insumos para optimizar la producción, sin embargo se afecta a otro tipo de relaciones en la naturaleza que son importantes para la misma producción”.
Por ejemplo, la vainilla en Veracruz, donde no tiene la importancia que podría tener debido a que los costos de producción han aumentado porque ya no existen en muchos lugares los polinizadores que facilitan la reproducción sexual de la orquídea y con ello la producción de la vaina, por lo que en muchos lugares la polinización se tiene que hacer manualmente lo que implica un costo muy alto, dijo.
En México aún hay muchos ecosistemas, por lo que no se puede decir que estamos en el mismo nivel de amenaza que otros países más industrializados con paisajes más empobrecidos y con una agricultura intensificada, aclaró, donde las personas que tienen abejas obtienen sus mayores ganancias porque los industriales los contratan para que las lleven ahí a hacer su trabajo.
Es importante reconocer el papel de las abejas, pues aunque hay otros animales e insectos que también aportan a la polinización, éstas son muy importantes
La diversidad y la riqueza de abejas es amplia, puntualizó puesto que hay muchas especies, unas más vulnerables que otras, entre las que hay muchas que se ven amenazadas porque tienen relaciones específicas por ciertas plantas, porque requieren condiciones de mayor conservación, sin embargo falta investigación para afirmar que tanto se está afectando a las abejas.
La investigadora, añadió que desde las políticas públicas hasta las decisiones que toman las personas inciden en el cuidado de la riqueza que tiene Veracruz, por lo que para protegerla se debe considerar qué tipo de alimentos consumimos y darle prioridad a una alimentación más orgánica que no requiere de una agricultura tan industrial que modifica los paisajes, que depende tanto de los agroquímicos. Qué ponemos en la mesa, hasta propiciar paisajes ricos en diversidad de plantas, parques en las ciudades, sistemas agroforestales en el campo, incide en el cuidado del medio ambiente.
Aunque Veracruz es un estado muy modificado y deforestado, todavía tiene una gran riqueza, pero hay muchos procesos que amenazan la riqueza de los paisajes que todavía tienen una gran variedad de plantas, de especies nativas y de otro tipo que son fuente de alimento y hogar de las abejas. Aconsejó el fomento de parques y jardines comunitarios con muchas plantas; más que concreto, vegetación con flores, con espacios para que las abejas puedan libar.