Veracruz, Ver.- De no contar con por lo menos 250 pesos, los pasajeros que arriban a la terminal aérea Heriberto Jara Corona de Veracruz se verán obligados a caminar más de un kilómetro de distancia para salir de la zona federal y poder tomar un taxi particular o el transporte urbano que transita por la carretera estatal Veracruz-Xalapa.
Ubicado en la congregación de Mata de Pita, el aeropuerto de la ciudad de Veracruz es una zona de difícil acceso; no hay autobús que llegue hasta el lugar y los taxis particulares solo tienen permiso de llevar gente pero no de recogerla en este sitio.
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¿Cuáles son las formas para salir del aeropuerto de Veracruz?
Para salir de la terminal aérea de Veracruz, en el caso de los pasajeros que llegan, existen solo tres formas; la primera es pidiendo el servicio de taxi concesionado al mismo aeropuerto donde dos empresas ofrecen el viaje con costos van de acuerdo a un tabulador seccionado por áreas y por la cantidad de pasajeros.
Por ejemplo, la tarifa mínima es de 250 pesos para cuatro personas que se dirijan a la zona 1, que es el primer cuadro de la ciudad de Veracruz; desde la terminal del ADO hasta el Centro Histórico. El servicio para más de cinco personas a la zona 1 aumenta a 395 pesos de tarifa máxima.
Las tarifas más altas son de 500 a 660 pesos para la zona 5 que se refiere a la zona turística de Boca del Río. Todos los pagos se hacen en efectivo, dentro de la misma terminal.
La segunda opción que tiene los pasajeros para salir del aeropuerto, es que un familiar los recoja en un vehículo particular, el cual tiene permitido estacionarse hasta por cinco minutos; en caso que exceda el tiempo un vigilante le llamara la atención y si no atiende la indicación se le genera una multa que va entre los tres mil a cinco mil pesos por tratarse de zona federal.
Los viajantes que no puedan costear el taxi concesionado y tampoco tengan un familiar que pueda pasar a recogerlo, no les quedará más que salir caminando del recinto y recorrer una distancia de más de un kilómetro hasta la carretera estatal hasta encontrar a un taxi libre o tomar cualquier autobús que transite por la carretera.
Realmente es una mínima cantidad de pasajeros que utilizan esta opción, sin embargo, para muchos de los trabajadores que laboran dentro del aeropuerto se trata de una ruta obligada.
De acuerdo con el personal que labora en el aeropuerto, algunas empresas ofrecen transporte a sus trabajadores, es decir, al cumplir con su horario laboral tienen a su disposición una unidad que los acerca a sus casas.
Sin embargo, hay otras empresas que no tienen transporte y los trabajadores tienen que buscar la forma para presentarse puntualmente a sus centros laborales y regresar a casa.
“Depende la empresa que trabajes, al menos donde estoy yo si nos ponen unidad, pero los que no tienen apoyo de vehículo tiene que buscar la manera, algunos compañeros tienen moto o carros propios y se les permite estacionarse con un permiso que es una tarjeta que se paga anualmente y cuesta como 350 pesos, ya con esa tarjeta ingresan y se pueden estacionar sin problemas”, dijo uno de los empleados.
Pero también hay otros trabajadores que no cuentan ni con moto ni con vehículo propio y que diariamente se “chutan” la camita de más de un kilómetro.
“Hay muchos trabajadores que viven por esta zona, por decir el fraccionamiento Sotavento que es el más cercano, Geo Villas que está sobre la carretera entonces si no tiene apoyo de transporte camina, la verdad es que te acostumbras, pero las personas que viven más lejos caminan hasta Las Bajadas que es sobre la carretera”, indicó.
Por tratarse de una federal se podría pensar que el trayecto hacía el aeropuerto es un sitio seguro, pero la realidad es que entrando desde la carretera estatal hacía la caseta, se encuentra llena de maleza y el piso no es completamente plano, hay aspectos que ponen en riesgo la seguridad de los transeúntes,
Los trabajadores que se dirigen hacia el aeropuerto a cumplir con su horario laboral deben bajarse sobre la carretera estatal y empezar el trayecto en las instalaciones del Polígono Naval de las Bajadas.
En el camino, se encontrarán con hundimientos en la banqueta y unos grandes clavos que quedan expuestos y que hasta pueden confundirse con el pavimento.
A unos 200 metros, llegarán a la caseta de vigilancia donde no hay vigilante pero si unos letreros con una serie de indicaciones “ALTO, apagar sus luces enciendan luces interiores, identifíquese, horario de 4:00 am a 12 am” y otro que dice “Zona federal, restringido el paso”.
Los trabajadores comentan que dentro del aeropuerto se manejan diferentes horarios y el más complicado es el de la noche porque si no se cuenta con apoyo de vehículo deberán caminar y la iluminación después de la caseta es muy escasa y se arriesgan a cualquier situación y se encomiendan a que un taxi se acerque a la zona y los recoja, pues los ruleteros solo pueden llevar pasajero hacía el aeropuerto pero está prohibido recoger, pues de lo contrario se harían acreedores a una multa que supera los nueve mil pesos por ser zona federal.
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Publicado en Diario de Xalapa
