Xalapa, Ver.-Personas que fuman tienen un factor de riesgo para enfermar de Covid-19, aseguró el responsable de la oficina de tabaco y alcohol de la Comisión Estatal contra las Adicciones de Veracruz, Daniel Lucio Cruz, quien explicó que existen afectaciones en las vías respiratorias principalmente en los alvéolos.
“El tabaco libera alrededor de 4 mil sustancias en su ingesta y 150 son cancerígenas, la mayor parte de estas sustancias van a afectar principalmente la estructura del pulmón”, dijo.
La enfermedad más dañina es la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica o EPOC por la inhalación de humo y la emisión de humo que hace el tabaco, añadió.
Comentó que en Veracruz existen más o menos 15 mil fumadores aproximadamente y la mayoría son fumadores ocasionales, cuyo consumo es de dos a tres veces por semana por la ansiedad y el estrés.
En el marco del Día Mundial Sin Tabaco, conmemorado cada 31 de mayo, indicó que el cigarro es una droga crónica cuyas afectaciones son a largo plazo y como factor de riesgo como cáncer de mama, cardiopatías, EPOC, hipertensión, entre otras.
“Se ha visto que el tabaquismo complica de manera directa la enfermedad de Covid-19, ya tenemos la base datos a nivel Veracruz, donde mucha gente que está siendo diagnosticada con coronavirus puede ser fumador y la recuperación tarda más”, agregó.
Sobre el vapeo mencionó que es una técnica nueva sobre el uso de un aparato eléctrico que produce humo.
“Incluso es más dañino que el fumar porque si bien cambia el mecanismo, ahora es una evaporación, las partículas que se generan en el vapeo son más pequeñas, las partículas penetran las membrana de células de los pulmones y llegan a lugares más profundos”, explicó.
El tratamiento debe ser por voluntad propia y gradual si tienen una dependencia a la sustancia, debido a que pueden generar un síndrome de abstinencia, debido a que la recaída es mayor. Y dentro de la Unidades Médicas ofrecen un tratamiento el cual por la contingencia se da por teléfono totalmente gratuito con terapia sicológica y médica, las cuales ofrecen atención en todo el estado, expresó.
“Debido a la pandemia estamos de guardia, sólo estamos dando atención telefónica a los pacientes porque no pueden acudir, salvo que sea una urgencia se atiende de vía presencial”, señaló.
En Xalapa pueden llamar al 22-88-10-19-87 y 22-88-15-08-30; en Veracruz 22-99-32-33-37; Coatzacoalcos 1 es 921-21-2-65-72 y Coatzacoalcos 2 es 921-24-8-23-95, entre otras que hay en todo el estado.
Consume 15 cigarros al día, pero "no es un vicio"
Mercedes Boullosa fuma desde los nueve años, desde que iba en tercero y cuarto de primaria, con los años agarró el vicio, pero cuando se embarazó dejó de fumar por salud.
“La única vez que dije voy a dejar de fumar es porque mi hijo era adolescente y empezó a retarme, si no hago algo grueso enfrente de él no me va a respetar nunca y había hecho un comentario sobre mi vicio del cigarro, le dije si ese es el problema ahorita lo apago y no vuelvo a fumar ni uno”, explicó.
Después de dos años sin fumar, se dio cuenta que su hijo no iba cambiar, por lo que volvió a fumar. “Para mí fumar es de mucho placer, de mucha fiesta, de estar muy bien y también es compañero de soledades”, dijo.
El año pasado enfermó de salud y le bajó al cigarro, empezó a buscar mejor tabaco orgánico para fumar. “Con la enfermedad le bajé bastante, fumaba 15 cigarros diarios por ahí, a veces no fumaba, y ahora que empezó el Covid-19 (…) lo único que me puedo quitar es el cigarro y me dejé una cajetilla para la hora de ansiedad”, señaló, por lo que ahora no fuma.
Indicó que ella decidió no fumar porque era su granito a participar en el cuidado del planeta, para ella no ha sido complicado dejar el cigarro, porque siempre que quiere lo deja y aunque no lo vea como un vicio para ella es un placer fumar.
Alejandro dejó de fumar hace casi 14 años por respeto a su pareja, a pesar de que viene de una familia de fumadores empedernidos. “Siempre estaba en un ambiente de humo, ir a ver a mis abuelos y a mis tíos, desde la secundaria agarré el cigarro, era algo natural, era una época que no se decía que hacía daño a la salud”, contó.
"En los salones de clase se fumaba, en los aviones contaban con un área de fumadores, en el camión, en el cine nadie te decía que apagaras tu cigarro, salas de espera de clínicas y hospitales, era normal fumar en varios espacios públicos, menos en el metro de Ciudad de México", recordó Alejandro.
Dejó el cigarro cuando le dijeron que decidiera entre su vicio o besar a su pareja, entonces sin pensarlo prefirió dejar el cigarro.