Orizaba, Ver.- Para evitar que los adolescentes consuman brownies con sustancias que ponen en riesgo su salud, es fundamental que familias y profesores trabajen de manera conjunta en la prevención del consumo de drogas, afirmó Denise Pino Romero, coordinadora del Departamento de Atención y Prevención de Riesgos en la Infancia y Adolescencia (Dapria), en DIF Orizaba.
En entrevista, al recordar el caso del estudiante que comió uno de estos pastelitos con una sustancia, dijo que esto es un riesgo y provoca un impacto en la salud, tanto en la emocional como en la física; “lo que nos lleva como padres, servidores públicos y docentes a colaborar en coordinación, para evitar esto que está pasando entre la juventud”.
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Las drogas, agregó, son esos monstruos que están presentes y, en cualquier momento nuestro hijo adolescente puede ser vulnerable ante esta situación, que cada día ocurre en más instituciones, abundó.
Explicó que el consumo de marihuana provoca un impacto lo emocional, pues daña el cerebro, pensamiento, la memoria y el manejo de las emociones.
Al consumirla se vuelven vulnerables a sufrir enfermedades como la depresión, ansiedad y la salud física queda afectada.
Los chicos, dijo, muchas veces no miden los riesgos que existen, el daño que una droga ocasiona directamente al cerebro, pues puede provocar muerte cerebral, incluso entrar en coma u ocasionar una deficiencia en alguna extremidad del cuerpo a consecuencia del consumo.
Para evitar que se presenten más casos de este tipo, dijo que los padres de familia deben recordar cuál es su responsabilidad en la formación de los niños y adolescentes: mantenerse cercano a sus hijos, privilegiar la comunicación, acercarse a ellos, darles afecto y dialogar, eso es sumamente importante, mencionó.
“Como papá o mamá, en lugar de estar en lucha constante con el hijo, de discutir, es mejor acercarse a él y hacerle saber que ahí estamos como papás para apoyarlo en lo que necesite. Hay temas que se desconocen, pero podemos aprenderlas como padres e informarnos”, aseveró.
Invitó a los padres a no esperar que llegue la etapa de la adolescencia para atender un riesgo, hay que prevenir antes. Acercarse a ellos a temprana edad, tener tiempo para los niños y atender su desarrollo emociona, enseñarlos a tomar decisiones y a fortalecer su autoestima.
Pino Romero hizo un exhorto a los directores y docentes a tener un rol en la formación de los adolescentes y reforzarlo en la formación y, observarlos para descubrir lo que no esté bien.
Resaltó que unidos, padres de familia y docentes con el DIF, se acercan pláticas a las escuelas, para que puedan mejorar la convivencia en el seno familiar, apuntó.
Alumno de la Escuela Secundaria Mártires de 1907, de Río Blanco, se intoxicó al consumir un pastelito que le obsequiaron, al parecer tres compañeras, pues presuntamente contenía marihuana.
El menor fue hospitalizado en el IMSS, al presentar problemas en su salud tras ingerirlo y tras proporcionarle la atención necesaria fue dado de alta el mismo día.
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En redes sociales, quien se identificó como mamá del adolescente, en redes sociales, dio a conocer lo ocurrido y exigió a las autoridades del plantel, que se investigue el caso y los estudiantes responsables reciban el castigo que merecen,
Y es que, al parecer, tres compañeras del adolescente compraron el panqué vía internet y se lo dieron a comer al chico, quien se intoxicó y requirió atención médica.