Orizaba, Ver.- Alrededor de 400 personas vulnerables que atiende periódicamente Casa de la Misericordia celebraron la Noche Buena con una comida doble, pidieron posada y además rompieron la piñata.
El Padre Román Ellas Oficial Gil, coordinador de Casa de la Misericordia mencionó que prepararon 800 raciones completas de pollo, espagueti, frijoles refritos, bolillos, ponche y agua de sabor.
- Te puede interesar: ¿Qué compran los orizabeños antes de la cena de navidad?
¿Quiénes más participaron en la celebración de Noche Buena en Casa de la Misericordia?
Cada uno disfrutó su comida y recibió una porción adicional para llevar y cenar, quienes se encargaron de servir a los comensales fueron jóvenes universitarios.
Al dirigirse a ellos, el Padre Román recordó que Jesús eligió nacer entre los pobres. Les pidió ser humildes, pero ricos de mentalidad positiva y de corazón grande para que en él quepan todos sus hermanos en Cristo.
"Tratamos de que se pasen un día en compañía y no en soledad", dijo.
Señaló que el número de personas que afrontan problemas en su economía sí se incrementó, aunque no todas llegan a Casa de la Misericordia a pedir apoyo.
"Muchas se val limitando en muchas cosas, a veces en su alimentación, otras en su salud. Algunos ven mermada su economía y se van midiendo de acuerdo a lo que perciben, van haciendo pininos, se limitan en algunas cosas, en pequeños gustos", dijo.
Finalmente, agradeció el apoyo de los benefactores que con sus aportaciones y donaciones hacen posible que Casa de la Misericordia brinde atención alimentaria, médica, en psicología, tanatología y jurídica a quienes menos tienen.