Ciudad Mendoza, Ver.- Personal paramédico de la Cruz Roja de esta ciudad, está debidamente capacitado y tiene el equipamiento adecuado para atender las emergencias que se presenten con con personas sospechosas con Coronavirus (Covid-19), afirmó José Uziel Martínez Garrido, Técnico en Urgencias Médicas (TUM) delegación Ciudad Mendoza, coordinador local del área de Socorro y Desastres.
Mencionó que para atender este tipo de llamados de auxilio siguen un protocolo que estableció el Comité Nacional de manera conjunta con la coordinación estatal y la local para atender la emergencia de manera adecuada, desde la recepción de las llamadas.
Y es que señaló, se tiene que saber si se trata de un caso sospechoso o confirmado. “Cualquiera que sea el caso se establecen protocolos locales para poder atender, con el apoyo del Centro Regulador de Urgencias Médicas y posteriormente en base a un cuestionamiento aplicado directamente a los familiares o al mismo paciente, para hacer una triangulación con la Secretaría de Salud y ver a dónde va a ir ese paciente”, dijo.
Subrayó que para ello se designa a personal y una ambulancia específicos para atender este tipo de emergencias.
Para ello, todo el personal que trabaja durante esta emergencia sanitaria, tanto remunerado como voluntario, 19 en total, cursó una capacitación de 15 horas en Bioseguridad, para afrontar la situación de la manera correcta y minimizar el riesgo de contagio entre ellos.
Martínez Garrido señaló que, aunque la plantilla normal que trabaja en la benemérita institución es de 43 personas, en esta contingencia se redujo en un 50 por ciento, pues también los servicios disminuyeron significativamente.
De atender un promedio de 110 servicios al mes, actualmente reciben alrededor de 65 llamados de auxilio, debido a que el flujo de personas y tránsito vehicular bajó.
El coordinador de Socorro subrayó que la Cruz Roja de Ciudad Mendoza está capacitada y cuenta con personal apto para atender las emergencias que se presenten.
Finalmente, pidió a la población quedarse en casa, ya que con ello contribuye a que el personal voluntario no se exponga mucho al contagio y puedan seguir brindando la ayuda cada vez que sea necesario.