Orizaba, Ver.- La cuarentena que se pidió hacer a los ciudadanos que no desempeñan actividades esenciales, debe respetarse y se prolonga porque no se tenía evidencia explícita sobre el avance de la pandemia en nuestro país, afirmó Helkyn Enríquez Báez, vocero de la Diócesis de Orizaba.
Dijo que en la determinación de alargarla, incidió también la falta de realización de pruebas y porque muchas personas no han respetado el confinamiento que se ha pedido. “Aunque algunas estén guardando la cuarentena, si otras personas siguen desarrollando actividades lúdicas, de diversión o dispersión, se arriesga a la población completa; hay que recordar la corresponsabilidad que tenemos de mantener estas medidas sanitarias para la protección de todos”, resaltó.
Expresó su respeto por quienes sí realizan actividades esenciales como los médicos, enfermeras, personal de limpieza, los que trabajan en bancos, sí como a quienes prestan servicio a la población en áreas como la recolección de residuos; “a ellos nuestro reconocimiento, nuestro respeto; porque están desarrollando actividades que los pone en riesgo y, aun así, por tener responsabilidad están realizando esas actividades”, subrayó.
Apuntó que está otro grupo, el de las personas que viven al día. Ante esto consideró que el gobierno, sociedad civil e Iglesias estamos llamados a solidarizarnos, como lo dice el mensaje del Domingo de la Misericordia: la caridad en estos días se debe traducir en solidaridad y, aquí es donde debe haber iniciativas para que se asignen recursos prioritarios y asistencia, a quienes por dejar de trabajar dejan de tener un ingreso para su sustento, que es esencial; porque hay personas que si no trabajan no comen y no pueden llevar también la canasta básica sus familias.
“Urge que las distintas instituciones que puedan colaborar en su sustento activen los mecanismos necesarios para poderles apoyar y, que a la vulnerabilidad por la pandemia no se sume la vulnerabilidad por el estado de precariedad en el que pueden vivir. Debemos, como dice el Papa Francisco, asistir de modo especial a quienes viven en las periferias existenciales, a quienes en este momento requieren del sustento básico para poder alimentarse y satisfacer sus necesidades básicas”, concluyó.