VERACRUZ, Ver.- La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores prevé cerrar el 2021 por debajo de las ventas proyectadas que es de millón 071 mil unidades.
Guillermo Rosales Zárate, Director Adjunto de la AMDA, destacó que existe un recrudecimiento en la crisis de producción mundial de microprocesadores que ha impactado al ensamble de vehículos y ante la insuficiencia de abastecimiento de los productores empezó a afectar a la industria automotriz, desde diciembre del año pasado.
Sin embargo fue a partir de julio que se ha visto más limitada la entrega de vehículos por parte de las armadoras a los distribuidores y por ende la capacidad de estos últimos es limitada para atender a los consumidores.
“El cambio social en las costumbre de la población que introdujo la pandemia del Covid-19, por ejemplo el trabajo en casa, la educación a distancia a generado una demanda muy importante de teléfonos inteligentes, pantallas, computadoras, tabletas en fin de muchos aparatos electrónicos que ha tenido como consecuencia una demanda que ha superado la capacidad de producción de las fábricas de semiconductores”, explicó el entrevistado.
Explicó que ante esta insuficiencia, los fabricantes han tenido que decidir a dónde canalizan el escaso suministro de estos componentes y se está privilegiando la producción de los vehículos de mayor costo, que no se consumen en el mercado mexicano, debido a que existe una economía de ingresos medios-bajos.
De ahí que este tipo de vehículos ya están escaseando en el mercado mexicano.
Incluso esta crisis en el sector automotriz, está aumentando el precio de los vehículos a nivel mundial, tanto de los vehículos nuevos como usados.
Como ejemplo citó que, en los últimos meses, en Estados Unidos se reportó un incremento de precios en los vehículos usados. Solo el pasado mes de julio se reportó un incremento superior al 10 por ciento, en términos anuales.
Mientras que en México, en lo que va del año, con datos al mes de julio, los vehículos nuevos han registrado un incremento del 9 por ciento.
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Por un lado, se tiene un problema de oferta y por el otro de insuficiencia del producto y esto genera un incremento de precios, que provocará un cierre muy complicado de año.
Por tal motivo no prevén lograr el incremento de ventas del 12.8 por ciento previsto para el cierre del 2021, que de por si era insuficiente para revertir el impacto de la pandemia de 2020, donde la caída fue del 28 por ciento.
En ese sentido dijo que la industria automotriz estaría cerrando el 2021, por debajo de los niveles de venta de la pre pandemia (2019).
“Estamos analizando y en espera de los resultados de agosto para ver que tanto nos va a modificar esta expectativa de un millón 071 mil que enfrentemos esta crisis que he referido en la producción de autos”.
Finalmente previó que esta crisis de producción se mantenga vigente hasta el primer semestre del 2022, debido a que solo existen cinco fábricas o compañías a nivel mundial, que se ubican en China y Taiwán.