Orizaba, Ver.- Personal del DIF detecta, generalmente los días jueves y viernes, entre seis y diez niños provenientes de otros municipios de la zona, que llegan a vender algún producto o a pedir limosna, afirmó Denis Pino Romero, coordinadora de Dapria en el DIF.
En el marco del Día Internacional contra el Trabajo Infantil señaló que es una situación muy preocupante que los niños y adolescentes estén expuestos a ser explotados laboralmente. Lamentablemente, dijo, de acuerdo con encuestas que ha hecho el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), 2.5 millones de niños y adolescentes mexicanos realizan alguna actividad laboral a corta edad, lo que los limita e impide que tengan acceso al estudio, a la convivencia y a que disfruten de sus derechos y los exponen a muchos riesgos.
“Independientemente de que se violentan sus derechos, los niños que trabajan en la calle, los que se encuentran en una situación de riesgo son más vulnerables a que el adulto, por la misma situación en la que se encuentra, pueda atacarlos; encontramos niños que pueden ser afectados por algún tipo de maltrato, violación, secuestro, trata de personas”, aseveró.
Refirió que en la ciudad han encontrado niños de entre cinco y 13 años de edad aproximadamente, expuestos en la calle, vendiendo dulces, algún utensilio de cocina e incluso pidiendo dinero entre los autos; “es preocupante porque no van a la escuela, al acercarse y preguntarles cuántos años tienen no saben responder porque no asisten a ninguna escuela; hay niños que están acompañados por un adulto y sabemos que el adulto nos miente cuando les preguntamos si van a la escuela; porque en realidad no van”, además agregó los que han encontramos son niños de otros municipios, pero independientemente del municipio que sean es preocupante.
A ellos se les da atención de manera inmediata. De primera instancia si se encuentran en alguna situación de salud delicada que necesite la atención médica, se le ofrece; también se les traslada en una camioneta del DIF a las instalaciones en clínica para que los médicos que están puedan atenderlos de manera inmediata y darles alimentación si no ha comido. “En temporada de frío si andan con su ropa mojada, le ofrecemos el cambio de ropa, trasladarlo para que pueda alimentarse e incluso tenemos la indicación por parte de la presidenta del DIF de llevarlo a su domicilio en caso de que el niño esté en una situación delicada de salud y ofrecemos lo mismo al adulto que esté con él, porque no podemos llevar sólo al niño; le ofrecemos el apoyo al adulto de manera inmediata”.
Apuntó que los días jueves y viernes encuentran entre seis y 10 niños trabajando en las zonas principales de Orizaba; “nos acercamos a ellos y nos damos cuenta de que dos o tres llegan a necesitar alimentación, qué es lo que podemos darles de manera inmediata”.
Esta situación se presenta a lo largo del año y se incrementa en algunas temporadas, como la del 14 de febrero, cuando llegan a vender flores, chocolates o a pedir dinero; cuando se atraviesa el 10 de mayo y cuando se acercan temporadas de vacaciones, pero es en diciembre cuando se incrementa más el número.