Orizaba, Ver.- Con un llamado a que fortalecidos con la gracia de los siete dones desempeñen con fidelidad su Ministerio, a ser infatigables en el don de sí mismos, constantes en la oración, alegres y bondadosos, a que animen a la comunidad y, en su actitud se vea en lo que creen y lo que los motiva, Monseñor Eduardo Cervantes Merino, ordenó a tres nuevos Diáconos para la Diócesis de Orizaba.
Diócesis de Orizaba, ¿quiénes fueron los diáconos ordenados?
En la Catedral de San Miguel Arcángel, Uriel Jovanny Rosete Texcahua, Isaías Vázquez Antonio y Ezequiel Silva Cid recibieron la imposición de manos del Obispo y el Evangelio que proclamarán.
“Uriel Juan, Isaías y Ezequiel, tres nombres de profetas, les quiero recordar que en el centro de su Ministerio ha de estar la Caridad, el servicio alegre y generoso en favor de los más pobres, procuren impulsar la dimensión social de la fe viviendo las obras de misericordia y construyendo comunidades cristianas que sean oasis de Caridad, donde se experimente el amor misericordioso del Padre. Impulsemos la evangelización y la Pastoral de la Caridad”, les dijo.
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En entrevista, el rector del Seminario La Sagrada Familia, padre Javier Onofre Valeriano explicó que el Diaconado está dentro del Sacramento del Orden que tiene tres grados, a saber: en primer grado está el Episcopado, en segundo grado está el Presbiterado y en tercer grado está el Diaconado.
“Estos jóvenes que se están preparando para el Sacramento del Orden para ser presbíteros son ordenados Diáconos Transitorios, así se les llama por que su ministerio durará un tiempo que según el Derecho Canónico debe ser mínimo 6 meses si es más eso depende de la decisión del Obispo”, dijo.
En la Diócesis de Orizaba, los últimos diáconos transitorios se van ordenando sacerdotes un año después.
Los tres jóvenes que se prepararon en el Seminario La Sagrada Familia son de la misma comunidad diocesana. Isaías Vázquez, pertenece a la Parroquia de Tlilapan, de la comunidad de San Andrés Tenejapa; Ezequiel Silva es de la Parroquia de Santa Gertrudis y Uriel Jovanny, también es de Tlilapan, pero de la comunidad de Jalapilla.
La celebración de la ordenación se realiza dentro de la iglesia y tiene su propio rito. Los aspirantes son presentados por el superior o responsable de su formación, quien da fe de que son idóneos para ser ordenados.
¿En qué consiste el rito de la ordenación?
El rito de la ordenación consiste en la imposición de manos del Obispo, seguida de la oración; después, sacerdotes que los acompañaron durante su formación les ponen la vestimenta propia del Diácono, reciben el libro de los Evangelios, porque el ministerio está en orden al Ministerio de la Palabra, así como de ayudar al Obispo y al presbítero en el ejercicio de su Ministerio, particularmente en el servicio de la Caridad, lo que se le llama Pastoral Social.
Ellos, abundó el rector del Seminario, tienen que ser promotores del servicio de la Caridad a los más necesitados. Ritualmente o litúrgicamente siempre estarán muy cerca del Obispo cuando éste presida la Eucaristía o de un sacerdote, preparando las ofrendas, proclamando la Palabra de Dios; además de que ya pueden hacer homilías.
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En la celebración su participación es muy significativa, pueden presidir algunos sacramentos como los bautizos y asistir el rito del matrimonio; pueden bendecir lugares, personas, cosas, pueden invocar la bendición sobre la comunidad, dar la bendición con el Santísimo.
“Así se les va a notar en su Ministerio y se les va a identificar por su vestidura, la estola, que generalmente los presbíteros usamos sobre los hombros, ellos solamente la usan sobre uno de los hombros, cruzado de izquierda a derecha”.