Río Blanco, Ver. - Mujeres emprendedoras iniciarán cursos para hacer de su negocio una microempresa que permita dar más oportunidades de trabajo en la región, en el municipio de Río Blanco serán 30 mujeres las que se suman a este proyecto.
Támara González, encargada del Programa de Profesionalización del Instituto Tecnológico de Orizaba (ITO), comenta que el emprender un negocio del rubro qué sea es una decisión difícil, pues a través de estos, las mujeres e incluso hombres que se aventuran a este tipo de proyectos llegan a saber de los riesgos que puede tomar su decisión, no obstante, la valentía que estos demuestran por seguir adelante los pone en proyectos donde puedan explotar su negocio y sus conocimientos.
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"El llevar una moneda a casa es un esfuerzo, llevarle un dulce a los hijos, sin duda esas horas que se pagan a las personas que cuidan a nuestros hijos en lo que trabajamos tendrá recompensa, por ello el curso tendrá temas básicos de cómo llevar un negocio y se sientan seguras".
Expresa que cada una de las emprendedoras lleva en su mente tener en orden su familia, su vida, su casa y su negocio, siendo todo este proceso un orden y lineamiento, que se aprende, por ello, cursos de esta índole "De Emprendedora a Empresaria", formarán parte de los cursos que son impartidos por catedráticos del ITO.
¿Qué esperan las emprendedoras del curso que recibirán del ITO?
La noche del lunes 29 de mayo, se presentaron las 30 mujeres que formarán parte de este proyecto, entre las asistentes, Alma Rosa Sánchez Ramírez es emprendedora de productos alimenticios, por lo que su negocio de Tamarindo dulce y enchilado a representando para ella un esfuerzo por salir adelante.
"Hago bolitas de Tamarindo para agua o bien con chile para golosinas, llevo un año con esto y vamos con altas y bajas, no pierdo la ilusión de crecer y ser un negocio establecido"
Afirma que tiene confianza en ella y su producto, por lo que espera que pueda hacer crecer su negocio y dar más oportunidades laborales a mujeres.
Por su parte, Christian Hernández Rojano, emprendió un negocio enfocado a la belleza de los pies "pedispa", es un centro de cuidado personal, pero también hacen masajes corporales, faciales, terapia de electrodos y otros servicios.
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Este emprendimiento tiene cinco años de existencia y narra que ha sido un proceso largo y duro, "no ha sido fácil, pero es satisfactorio, me encanta que este tipo de proyecto se haga, nos faltan las herramientas necesarias para ejercer el emprendimiento, pues lo hacemos empírico, pero es prueba y error, creo que nos ayuda a impulsar el potencial que tenemos".
Carolina Contreras Camacho se dedica a la distribución de productos de temporada como abarrotes en las pequeñas tiendas de Nogales, Río blanco y Ciudad Mendoza, afirma que su tipo de emprendimiento no es muy sonado en la zona, por lo que ha ido evolucionando bien.
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"Es un servicio que se requiere en la zona porque hay personas que no tienen la posibilidad de moverse fácilmente, entonces yo llego hasta ellas", dijo.
Su emprendimiento es reciente, pues, tiene 6 meses en el mercado, por lo que ha visto buena respuesta, ya que ha visto que su negocio cubre necesidades, por lo que agradece que el gobierno y escuelas de la zona fomenten que las mujeres puedan tener acceso a profesionalizarse.
Finalmente, Bárbara Martínez Cancino, es enfermera de profesión y su emprendimiento se basa en ello, apoyar a mujeres de su gremio a conseguir empleo y dar un buen servicio.
"Quiero llevar este proyecto a otro plano y poder distribuirlo en diferentes zonas para alcanzar un máximo de pacientes y apoyar a más licenciadas en enfermería que necesiten trabajo".
Hace 9 meses empezó con este emprendimiento y aunque fue con poco ingreso económico como inicio, ha apoyado a amigas y conocidas qué sabe su labor como profesional es necesario para cuidar a pacientes.
Afirma que este tipo de cursos son idóneos para las emprendedoras, pues aunque haya la inteligencia no se tienen las herramientas, por ello una vez que las adquieran se verán grandes cambios y poder tener una microempresa.
Estos cursos tendrán un tiempo de duración y será en los primeros cinco meses cuando se haga la primera evaluación de lo realizado, aprendido y lo que se ha puesto en práctica por cada una de las aspirantes.