NOGALES, Ver.- Las lluvias que más afectan al municipio de Nogales son las que se registran en los límites con el estado de Puebla, por ello durante esta temporada mantienen monitoreo y comunicación permanente con un vigía de San Antonio Atzizintla, Puebla, quien los alerta de cualquier riesgo por esta causa.
El presidente municipal Guillermo Mejía Peralta dijo que las lluvias que se registran en la zona centro son importantes, pero las que los mantienen en alerta son las que se registran en los límites con el estado poblano.
“Si se nos acumula en el estado de Puebla nos afecta en la represa el Infiernillo y pudiéramos tener una tragedia. Por eso siempre estamos monitoreando desde San Antonio Atzitzintla, Puebla con el apoyo de un ciudadano a quien se le da una gratificación”, dijo.
Él vigila en la comunidad El Sanjuanero el cauce del río que allá comienza y que pudiera colapsar en la parte baja como ocurrió en el 2003. Esa vigilancia permite alertar tanto Protección Civil coordinación Orizaba como a los municipios de Ciudad Mendoza y Nogales.
Dicho aviso les da alrededor de 30 o 45 minutos para alertar a la población que habita en o cerca de las zonas de riesgo, como lo son la ribera de los ríos y evacuarlos.
Mencionó que hasta ahora, gracias al dragado de la represa El Infiernillo, que desde el 2018 hacen de manera conjunta los ayuntamientos de Ciudad Mendoza, Nogales, Huiloapan con la CAEV, Pemex y Protección Civil del estado, no se ha registrado ninguna afectación grave.
“Nos metimos a conciencia al dragado de la represa que es la que si llegara a colapsar ocasionaría una tragedia igual o peor que la del 2003”, aseveró.
Lo que se limpiaron fueron cerca de 50 mil litros cúbicos. Lo que no se pudo limpiar por falta recurso fueron los cauces del río Chiquito y la Carbonera.
“No nos da el presupuesto para las dos cosas, por ello actuamos en prioridad e importancia y los recursos que se destinen para este tipo de obras van directamente a la represa El Infiernillo”, dijo.
Actualmente, concluyó, a la represa le queda aproximadamente un 40% de capacidad para librar las lluvias.