ORIZABA, Ver.- Durante las fiestas navideñas y de fin de año las personas suben entre dos y hasta siete kilos de peso debido a la ingesta de hasta cinco mil calorías, que es el equivalente al consumo total de dos o tres días, “eso es lo único que necesitamos para aumentar un kilo” y es lo que un adulto puede consumir durante una cena navideña o de fin de año, afirmó Sandra Ruiz Morelos, nutrióloga del DIF Orizaba.

Dijo que durante la temporada de vacaciones de invierno, es decir, de mediados de diciembre a principios de enero se registra un descontrol muy grande en la alimentación y sus consecuencias se arrastran durante todo el año.

El aumento de peso rápido y se debe a varios factores, uno de ellos es el desajuste en los horarios de comida, los lugares de comida, la falta de actividad física, los cambios de tipo de alimentación pues se comen alimentos distintos a los acostumbrados; “las fiestas y excesos extraordinarios que no son en una sino en varias ocasiones”.

Apuntó que bajar el peso que se gana en esas fechas es difícil pues son pocas las personas que logran recuperar su peso y los que no comienzan a recurrir a dietas, pastillas milagrosas para bajar rápido esos kilos, pero que al final solo afectan más la salud.

Los principales alimentos de esa ganancia de peso rápida son las bebidas azucaradas como refrescos, jugos, ponche, chocolate, que no se toman con medida; así como el alcohol, que tiene muchas calorías y que al consumir en exceso aportan hasta tres mil calorías.

Dijo que todo esto hace que en enero las estadísticas por infarto al miocardio y crisis hipertensivas aumenten hasta un 20 por ciento. Estos, en parte relacionados por el aumento de peso a consecuencia de los excesos en la alimentación en las fiestas de diciembre y por el consumo de bebidas alcohólicas.