Orizaba, Ver.- Con mucho ánimo y con el nerviosismo porque afrontará uno de los retos más importantes de su vida: el examen de admisión a la Universidad Veracruzana, Carmen y Arturo acompañan a su hija María del Carmen, a que presente su examen. Ambos la esperan afuera de la facultad de Enfermería.
En entrevista Carmen platica que su hija desde pequeña les expresaba que ella quería ser doctora para curar a las personas y cuidar de la salud de su mamá. Ese sueño lo ha mantenido y ahora que está por terminar su bachillerato, se acerca más a cumplirlo.
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La familia proviene de Omealca y llegó a esta ciudad a las 7:30 de la mañana, a tiempo para que la joven ingresara a la facultad donde le tocó presentar el examen.
La señora Carmen recuerda las palabras del director de la secundaria en la que estudió su hija. El director dijo: “Espero que así como acompañan a sus hijos en su primer día de secundaria, haya sido en el kínder, la primaria y, así los acompañen en su primer día en la universidad”.
Dijo que es importante siempre acompañar a los hijos y, al ser este un momento que su hija ha esperado con ilusión, la acompañaron; Maricarmen es la mayor de sus tres hijos.
“Así como ella se siente nerviosa de presentar el examen, así nos sentimos su papá y yo”, dice y señala que tal vez ella no tuvo la oportunidad de estudiar una carrera, pero que su hija la tenga es importante para su futuro y ellos la apoyan.
“Si dentro de nuestras posibilidades está apoyarla no importan los sacrificios que tengamos que hacer; sabemos que vale la pena impulsarla”, añade la entrevistada.
Abundó que comparten con los demás padres la idea de hacer lo necesario para que los hijos puedan estudiar. “Es la meta de todos los que esperamos aquí afuera”, señala.
Saben lo difícil que es quedar en la carrera de Medicina
Carmen y Arturo están consientes, lo mismo que su hija, de que es difícil ingresar a esa carrera, pues es la que mayor demanda tiene de todo el programa de estudios de la UV, pero confían en que su hija tiene los conocimientos suficientes y obtendrá uno de los lugares.
“Si no logra pasar hay tiempo para que se vuelva a preparar y lo intente de nuevo, porque en la vida esta prueba es un aprendizaje”, dice.
Apuntó que nunca hay que bajar el ánimo a los hijos. “Esta es la carrera que quiere y debe de prepararse, esforzarse más para cumplir su sueño, sí se puede”, destaca.
Recuerda que hoy salieron de madrugada de Omealca para llegar cerca a las 7:30 de la mañana a Orizaba. Cuando llegaron a la sede del examen ya había algunas familias que también acompañaron a sus hijos e hijas.
Maricarmen fue una de las primeras en ingresar al plantel, tras recibir las últimas recomendaciones de sus papás. “Le dijimos que estuviera tranquila, que respondiera lo que se le facilitara y después lo demás; esperamos que todo salga bien”.
Desde pequeña María del Carmen quería estudiar medicina salvar personas, por ejemplo, cuando veía que me enfermaba me comentaba, yo algún día me voy a preparar para que nunca te enfermes y no te pase nada, comenta.
“Vamos a esperarla aquí afuera hasta que salga y sea cual sea el resultado siempre cuenta con sus padres, estoy muy orgullosa de mi hija sabemos que se preparó bien y no pasa nada”, apunta.