Orizaba, Ver. - El olor a incienso, flores de cempasúchil y rosas decoran los pasillos de panteón municipal que este martes 1 de noviembre es visitado por familias completas visitando a quienes dejaron el plano terrenal y que hoy los recuerdan con mucho cariño.
En los pasillos del panteón municipal de Orizaba, Juan de la Luz Enríquez; hombres, mujeres y niños caminaron hasta llegar donde descansan en la eternidad sus seres queridos, con cubetas, escobas, cepillos, palos, picos, palas y escobas se acercaron a realizar limpieza de las tumbas, para luego poner flores de cempasúchil, rosas, margaritas, flor moco de pavo, petunias, gerberas entre otras flores ya sean naturales o de papel.
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El colorido en los sepulcros luce en tonalidades naranja, amarillas y rojas, pues el día soleado ha permitido que familias completas acudan al panteón para honrar a sus muertos, quedarse un rato con ellos, platicar y retirarse a seguir sus actividades del día.
Para Héctor ha sido un año difícil, pues no pudo despedirse de su padre, quien falleció por consecuencia del Covid-19 y aunque en su momento superó la enfermedad, fue un problema en el corazón, lo que lo llamó al cielo en febrero de este año, "le gustaba mucho la música y pude con mi celular ponerle las canciones que le gustan, le traje las flores que más le gustaban y aunque mi mamá no pudo venir al panteón, le mando un beso conmigo".
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Son muchas las historias de despedidas y tristeza que alberga cada tumba en el Panteón de Orizaba, pues la distancia y los años no lograrán que los seres queridos se olviden, como doña Bertha quien aprovecho para venir desde México a visitar a su esposo que falleció hace 13 años, "cuando él se fue mis hijos me llevaron a la ciudad de México, la pandemia impidió que lo visitará por dos años, pues leí que el panteón cerró, pero este año nada me impidió venir a ver a mi viejito".
Los jóvenes, también se hacen presentes como Lupita, quien hace 8 años perdió a sus bisabuelos y aunque los recuerda con mucho cariño añora el verlos y visitarlos en su casa, "ahora me toca verlos en esta su última casa, no estoy sola, pues tengo a mis padres y pareja, pero ellos fueron parte importante en mi vida".
¿Hay tumbas en el olvido en el cementerio de Orizaba?
Hay sepulcros que lucen olvidados, con una o dos flores sobre los libros donde se ponen los nombres y fecha de fallecimiento, pero esto no quiere decir que hayan sido olvidados en el corazón, pues la distancia puede generar que no se visite constantemente, como el caso de Ramiro Pérez quien al morir sus padres se fue de la ciudad de Orizaba teniendo tan solo 23 años, hizo su familia y hoy regresa con ella a visitar a sus padres, "jamás los olvidaré, veo por mi esposa y mi hija Ximena, sé que ellos me entienden y en casa les puse su altar, donde acompañan a mi primer hijo que no pudo llegar a este mundo".
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Cabe hacer mención que el campo santo estará abierto toda la noche y espera la vista de más de 15 mil personas este 1 y 2 de noviembre. No se permite la entrada a vehículos y bicicletas, por lo que se pide tomar sus precauciones.