ORIZABA, Ver.- Román Vázquez González, líder del Movimiento Indígena Liberal, Plural y Autónomo de Zongolica (MILPAZ) reconoció que existe desestabilización social en la zona serrana, así como inseguridad, fenómeno que se resiente a nivel nacional, estatal y regional debido a la ineptitud de las autoridades.
“Nos preguntamos qué pasa en el Congreso, donde aprueban leyes absurdas cuando la demanda prioritaria es la seguridad”, agregó.
Al referirse al asesinato de un joven del municipio de Texhuacan, enclavado en esa región, que el muchacho era trabajador, no se metía en política, ni nada, aun así “lo acribillaron ruinmente con armas de alto calibre, por equivocación de una organización criminal, mientras las corporaciones no tienen coordinación. Un amigo pidió el apoyo a la policía municipal y a la Guardia Nacional y nunca los apoyaron, los dejaron solos”, aseveró.
Recordó que hace 7 años levantaron a 3 miembros de su familia, en la administración de la exalcalesa Lidia Irma Mezhua, “mi hermana le pidió apoyo directo a la presidenta y a la comandancia, y todos se escondieron; tenían órdenes de ocultarse, apagaron las luces del parque. Y un coordinador del gobierno estatal vino hasta casa de mi hermana y le dijo: “O retiras la demanda que está en la Fiscalía o mañana vienen por tus hijas. Siendo funcionarios de gobierno ¿cómo vinieron a decir eso a mi hermana?”.
Ahorita que supuestamente existe una estrategia de seguridad del Gobierno Federal, la pregunta es, a donde está. “Los gobiernos se llenan la boca diciendo que tienen todo. Nuestro alcalde alcahuete diciendo que su policía de élite, y que es el municipio más seguro de todas las galaxias; el gobierno del estado dice que no pasa nada, y el Gobierno Federal se jacta de decir que él tiene otras cifras, pero los hechos los viven los ciudadanos y los difuntos los enterramos nosotros”.
Afirmó que el poder ya se convirtió en una mafia delincuencial, institucional, “Te lo digo así con todas sus palabras, ¿quieren pruebas?, ahí está el general Cienfuegos, no lo digo yo, lo dicen las autoridades internacionales, que más pruebas quieren para imaginar que aquel alto mando tenga vínculos y un municipal, estatal o ministerial, no”.
Cuestionó dónde está la estrategia de seguridad fallida del Gobierno Federal, “si nosotros le faltamos el respeto al Gobierno Federal con palabras, él nos lo falta al respeto con hechos, por no hacer su trabajo y el precio lo pagamos nosotros, cuando nosotros somos los que damos el dinero para la compra de armamento, equipamiento, sueldos para las familias de los integrantes de las corporaciones, y para qué, ¿para que se sean servidumbre de la delincuencia?”, espetó.