ORIZABA, Ver.- Tras la descacharrización que realizó la coordinación de Salud de manera conjunta con Limpia Pública y Vectores de la Jurisdicción Sanitaria VII en colonias de la ciudad, trabajadores municipales redoblan esfuerzos para conservar limpios parques y jardines, así como las áreas de esparcimiento y evitar que en ellos haya criaderos de mosquitos.
Irasema Del Bosque Márquez, titular del área de Salud recordó que en la reciente jornada que se realizó se retiraron 348 toneladas de artículos en desuso, viejos, inservibles que acumulan las familias en patios y azoteas, que se convierten en potenciales criaderos del insecto que transmite el dengue.
“Se descacharriza porque la instrucción es que las familias desechen lo que ya no utilizan o no sirve, desde una cubeta hasta un sillón, colchones y demás, que dejan en un rincón”, dijo.
Ahora, con apoyo de personal de la Jurisdicción Sanitaria se checa que la ciudad quede libre de criaderos de mosquitos, trasmisores del dengue. “Checan el avión, el cerro del Borrego, la alameda, los Chiringuitos, el Teleférico, la Plaza Río, el parque del Palacio de Hierro, los parques, inmuebles y fuentes, para que en ellos no haya basura donde se reproduzca el mosco”, agregó en entrevista.
Destacó que un par de promotores de salud verifican y certifican esas áreas. El primer lugar certificado como libre de criaderos fue el Poliforum Mier y Pesado.
Agregó que, en vísperas del regreso a clases, directivos y la coordinación de Educación también se ponen de acuerdo para limpiar los edificios escolares, para que después sean fumigados, abundó.
Del Bosque Márquez invitó a que la gente evite tirar basura en la calle, ni siquiera la tapita de la botella de agua o refresco, porque son criaderos potenciales del insecto que trasmite el dengue, “y ya tenemos bastante con el Coronavirus”, concluyó.