ORIZABA, Ver.- A pesar del esfuerzo de los colectivos y del gobierno para tener una legislación e instancias para la búsqueda e investigación de estos delitos, no se han podido frenar, y por ello, Veracruz es el estado con mayor número de fosas clandestinas y las más grandes que se encontraron hasta ahora, así como el primer lugar en feminicidios, aseveró Ximena Ugarte Trangay, abogada del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, organización civil que trabaja en la entidad.
Subrayó que las desapariciones es un problema nacional, generalizado, que se ha convertido en una forma de violencia que, implica también la generación de otros delitos; y si bien se ha tratado de hacer a nivel institucional y nivel de gobierno toda una política nacional en materia de desaparición, sigue habiendo una serie de patrones estructurales que quizá no se han logrado investigar o desmontar de manera adecuad, para empezar a disminuir, no solamente la intensidad de las desapariciones, sino también a generar mecanismos adecuados de búsqueda e investigación de las personas que ya se encuentran desaparecidas.
En materia de feminicidios, señaló que, al acompañar y apoyar casos de violencia hacia la mujer, ven que cada vez se incrementa más este tipo de violencia, en el que se generan patrones de discriminación muy claros sobre el cuerpo de las mujeres. Cada vez son más violentos y ya no se registran solo en el ámbito privado, sino también en el público.
Refirió que han hecho el señalamiento para que se empiece a investigar la relación de la desaparición de mujeres con feminicidios o con la trata de personas, para efectos de tener patrones claros de investigación y búsqueda de manera inmediata, una vez que desaparecen.
En ese marco, agregó, solicitaron una tercera alerta de violencia de género en el estado de Veracruz, por desaparición de mujeres.
Que ahorita estamos peleando para que no se acumule con la primera alerta que es exclusiva del tema del feminicidio, en donde podamos encontrar estos patrones de criminalidad e investigar la muerte violenta de las mujeres como feminicidios, ligadas en su mayoría, a una anterior desaparición o con la violencia