Orizaba, Ver.- Al menos un centenar de estudiantes, de entre 15 y 19 años, de diferentes instituciones educativas de la ciudad, tanto de escuelas públicas como privadas se organizaron y recorrieron en grupos la ribera del río Orizaba recogiendo todo tipo de desechos que encontraron a su paso.
Los jóvenes aprovecharon el día de asueto que tuvieron por el Día del Maestro y cubrieron el Paseo del río de norte a sur. Aunque no se cuantificó la cantidad de basura que recogieron, señalaron que encontraron de todo: bolsas de plástico, ropa, botellas de cristal, plástico, papel, escombro y hasta animales muertos.
La convocatoria, explicó Emmanuel Ramírez Solano, estudiante de 19 años originario del municipio de Atzacan, la hicieron él y otros dos amigos a través de las redes sociales y obtuvieron una gran respuesta de chicos de las diferentes escuelas, quienes conformaron la agrupación Jóvenes Unidos por el Medio Ambiente (JUMA). El común denominador es que a todos les preocupa el deterioro que sufre el medio ambiente y la falta de acciones específicas.
“Queremos que las futuras generaciones disfruten de lo que nosotros tuvimos de niños, nosotros crecimos rodeados de muchas plantas, árboles, animales, que ya casi no hay; ahora es difícil encontrar una mariposa, luciérnagas ya no hay y yo quiero que para mi hermanita haya un buen planeta”, indicó Ramírez Solano.
La convocatoria la hicieron en Facebook, Whatsapp y se espera que se integren más jóvenes. Dijeron que ellos realizarán este tipo de acciones las veces que sean necesarias.
A su paso se encontraron con el alcalde Igor Fidel Rojí López, a quien le dieron a conocer todo lo que encontraron a lo largo del río y él por su parte se comprometió a apoyar su labor en lo que necesiten, pues el grupo es ejemplo de que la sociedad civil organizada sí puede realizar acciones en beneficio de su entorno.
Los desechos que recogieron los chicos, explicaron, serán separados, se venderán y otros se entregarán a programas como el de Niños con cáncer, como es el caso de las tapas de plástico de las botellas; mientras que el PET lo venderán para obtener recursos y comprar arbolitos para plantarlos y reforestar donde se requiera.