A la xalapeña Lu Zardain desde pequeña le inculcaron el aprecio y respeto por los animales, sin embargo, ese no fue el primer motivo para volverse vegana, sino comprobar que efectivamente su salud mejoró con este régimen alimenticio.
Más allá de estar en tendencia, porque va en aumento el interés por ser vegetariano o vegano, la joven emprendedora comparte en entrevista que ella se siente contenta porque han disminuido sus malestares de gastritis y colitis que la aquejaban por el consumo de carnes y sus derivados.
“Yo empecé a ver cambios desde los primeros meses, en mi proceso de digestión, en mi estado de ánimo y hasta en mi sudor”.
Con seis años como vegana, Lu Zardain no intenta convencer a nadie de cambiar sus hábitos alimenticios, pero sí sugiere probar. A quienes acepten la sugerencia, les recomienda visitar a un nutriólogo, para que les dé la información correcta y cómo pueden lograr un sano equilibrio.
“A mí me parece que se han generado ideas negativas sobre el veganismo y vegetarianismo. No se trata solo de comer verduras o frutas porque sí, sino saber hacer un balance y conocer cada una de sus propiedades”.
Puntualiza que las dietas vegetarianas o veganas bien planificadas son una opción nutricionalmente saludable y equivalente a una dieta que incluya carne. Además, a quienes ya iniciaron o están en el proceso, los exhorta a ser creativos.
¡No tiene por qué ser aburrido!, exclama la diseñadora y actualmente gerente general de Veggisima, un espacio xalapeño donde prepara hamburguesas con avena y plátano macho, tacos de pastor de soya y hasta “hot dogs” con “salchichas” de zanahoria, cuyo sabor ella misma fue perfeccionando durante un año.
Cuidar la salud y el peso, divertirse en la cocina y al mismo tiempo ser “amigable” con los animales son algunas de las ventajas de optar por eliminar el consumo de carne —y sus derivados si así se quiere— en el país que tiene más personas con obesidad en el mundo.