ORIZABA, Ver.- Los niños que tienen cáncer no pueden dejar de recibir su tratamiento como lo marca el protocolo, ni sustituir un medicamento por otro, de hacerlo la enfermedad genera resistencia y el paciente puede recaer, aseveró Víctor Hugo Cabrera García, oncólogo pediatra del Hospital Regional de Río Blanco.
En entrevista explicó que todo lleva un proceso, un protocolo que no se puede cambiar, por lo que es muy difícil de sustituir, dijo.
Subrayó que el desabasto de medicamentos para los tratamientos, específicamente para quienes padecen Leucemia Linfoblástica Aguda se recrudeció desde diciembre del año pasado y enero de éste, tanto por el desabasto propio de medicamentos por parte de la industria farmacéutica como por el desabasto del hospital.
Señaló que, aunque éste llegue completo no pueden garantizarles uno o dos meses completos porque de repente llegan más niños “y necesitamos tomarlos de ahí. Tenemos que hacer milagros y estirar el gasto del medicamento para que cubra a todos”, indicó.
Explicó que en el programa tratan a los niños técnicamente por semana, de manera que reciben su tratamiento de manera continua.
No podemos atrasarnos más de dos o tres semanas porque eso va a condicionar a la misma enfermedad, aunque esté en remisión, siempre hay una célula o dos que pueden hacer resistencia y va a llegar un momento en que si no estamos dando de forma constante el tratamiento la enfermedad hace resistencia, recae el niño y va a ser más problemático
Explicó que entonces implica mayor toxicidad en la quimioterapia e incluso se llega a recurrir a otros procedimientos como un trasplante, "que ahorita no hemos necesitado, pero sí tenemos que llevarlos hasta esas instancias”, señaló.
La supervivencia promedio es de cerca del 65 por ciento y no se ha podido incrementar. Está igual que la nacional y eso gracias al apoyo de la asociación (Aopac), que les ha dotado del medicamento a tiempo para cumplir con los protocolos establecidos para cada paciente
“Ahorita con las cuestiones de desabasto y esas crisis que tenemos han salido a flote los niños gracias a este apoyo. Hemos tratado de mantener esa sobrevida, pero esto no nada más implica la quimioterapia; la sobrevida depende mucho también del uso de antibióticos de medicamentos de urgencia, porque también niños que llegan con inmunosupresión y si no reciben antibiótico fallecen de una infección severa”, abundó.
Al referirse a la quimioterapia, el especialista dijo que en ésta los antibióticos son los más importantes. “Hay días que tenemos completa la dosis, pero hay días que la tenemos incompleta y es cuando vamos corriendo con la asociación a decir necesito que me apoyes con este fármaco para que no pierda la secuencia de la dosis; porque eso también implica retrasos en el tratamiento y en mayor resistencia de los microorganismos".
Dijo que tratan de tener lo más completo el tratamiento para los menores, con medicamentos de base como los antibióticos.