El hábito del ahorro es considerado como una de las actividades más importantes a lo largo de la vida y es uno de los propósitos de año nuevo infaltables en la lista de muchas personas.
Aunque cualquier día es bueno para implementar esta acción, aprovechando el inicio del año 2024 no debemos dejar pasar esta oportunidad, ya que este inicio es perfecto para implementar nuevos y mejores hábitos.
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Así que si entre tus propósitos se encuentra mejorar tus técnicas de ahorro o buscas algún método nuevo y efectivo, el conocido kakebo puede ser una opción muy eficaz.
¿En qué consiste el método kakebo?
De acuerdo al libro Kakebo: El arte japonés de ahorrar dinero de la autora Fumiko Chiba, este método proviene desde Japón y básicamente se basa en “cuadernos” que eran utilizados para controlar los gastos familiares.
Su popularidad se intensificó a lo largo del mundo convirtiéndose en uno de los sistemas de planificación más eficaces, ya que consiste en un esquema de organización en el que básicamente deberás plasmar a detalle todos los gastos e ingresos que tienes.
Aunque puede sonar como una tarea complicada por el hecho de anotar cada pequeño gasto que tengas, el método kakebo ofrece un amplio panorama de todo el dinero con el que cuentas y así ayudarte a controlar tus gastos, reducirlos y alcanzar las metas financieras que busques.
Uno de los primeros pasos para implementarlo será anotar los ingresos con los que cuentas mensualmente, además con lo que cuentas para gastar y el monto que buscas ahorrar. Para ello deberás anotar a detalle cada uno de los gastos que tengas, incluso por más pequeños que parezcan.
- Por ejemplo, anotar los ingresos que percibes, ya sea que cuentes con algún salario, deberá ser el principal punto en tu lista.
- Gastos primordiales: como los pagos de agua, luz, gas, despensa, entre otros.
- Una vez que apartes estos gastos puedes implementar tu meta de ahorro.
- Además, una cantidad que puedes gastar, es decir, de lo que te quede, deberás restarlo a la suma total del dinero con el que cuentas y así contarás con un presupuesto fijo y estimado sin descuidar tus metas de ahorro.
Aunque en un principio pareciera un método un poco complicado, es de lo más sencillo, pues simplemente se trata de anotar y anotar. Esto permitirá que tengas y veas un panorama claro del dinero con el que cuentas, logrando así que identifiques cuáles son algunos gastos innecesarios también conocidos como “gastos hormiga”.
Lo más recomendable en este método es contar con una libreta, ya que funcionará como un tipo diario donde anotarás cada detalle, sin embargo, la tecnología no está peleada con ello, por lo que puedes usar tu teléfono o cualquier electrónico que te permita tener tu lista a la mano.
Como todo en la vida este ejercicio requiere disciplina, aunque parezca algo tedioso por tener que anotar cada pequeño detalle, conforme vayas avanzando verás que es posible identificar aquellos productos en los que gastas demasiado, por lo que en pasos sencillos se convertirá en un plan funcional.