Nogales, Ver.- Al menos 8 mil 500 plantas de pino pátula sembrarán socios del Club Rotario Valle de Orizaba y la feligresía de la Parroquia San Isidro Labrador, en tres comunidades de este municipio, que resiente la tala de ese recurso. La planta la donó Fundación Salvatierra.

La siembra de esta especie es parte del programa “Un millón de árboles”, que lleva a cabo dicha fundación e involucra a varios estados del país, con la intención de generar sustentabilidad.

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“Es lo que vamos a dejar a nuestras siguientes generaciones, vamos a conservar lo que recibimos cuando nacimos, el lugar en el que vivimos, el agua, el oxígeno; vamos a cuidar o a prever seguridad alimentaria”, dijo Tere Salvatierra, presidenta de dicha fundación.

Para llevar a cabo este proyecto, los integrantes del Club Rotario firmaron la Carta de la Tierra, pues es fundamental que esas acciones se vean reflejadas en la comunidad, ese es su compromiso.

Menciona que cuando se planta un árbol, “No sólo sumamos a tener oxígeno, sino a mejorar las condiciones del aire, estamos evitando la erosión del suelo, estamos sumando a tener tierra fértil, conservando la humedad, estamos manteniendo los ríos limpios, llevando agua a los mantos acuíferos; parece algo sencillo, pero nuestros números duros en deforestación en el país son tremendos”, remarca.

Vigilarán los árboles durante 3 años para generar sustentabilidad

Dijo que parece una tarea fácil, pero sembrar 8 mil 500 árboles, lleva su labor. La Fundación Salvatierra, además de sembrar árboles tiene proyectos que fortalecen esta acción como lo es desarrollar técnicos comunitarios, para que sepan qué se hace cuando se reforesta y cómo cuidar la especie.

Estos ejemplares van a ser vigilados durante tres años para que cumplan con el objetivo de ser plantados: reforestar las zonas importantes que desgraciadamente recienten la pérdida de bosque.

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“El compromiso de plantar es generar y procurar la sustentabilidad. Cuando nos comprometemos a la supervivencia de la especie y a cuidarla durante los siguientes tres años, es para que el arbolito esté feliz y cachetón; no queremos plantar un árbol que no va a vivir, queremos asegurar la continuidad de este proyecto”.

Territorio parroquial está rodeado de aserraderos

Por su parte, el Padre Marcos Palacios Cárdenas, párroco de San Isidro Labrador, agradece que se tomara en cuenta esa zona para reforestar. “Me da mucha pena, pero esta parroquia tiene muchos aserraderos. Yo sé que son personas que viven de eso, sé que es su trabajo lo digo con mucho respeto, pero también sé que cuando siembras un árbol, vemos que va creciendo y, de momento escuchas una motosierra que ya lo está tirando, es triste. No entiendo por qué no nos hemos tomado esta tarea de reforestar, en serio”.

Señala que la población se queja de la falta de agua, pero debería preocuparse y quejarse por la falta de árboles. Reconoció que hay proyectos gubernamentales respetables, pero parece que están faltando en realizar esta labor en serio.

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Feligreses y socios del Club Rotario sembrarán las plantas

Quienes sembrarán esas plantas serán socios del Club Rotario Valle de Orizaba y también feligreses de esa parroquia. El sacerdote dijo que a los papás de los niños que harán su Primera Comunión en diciembre próximo en esa parroquia, se les tomará como asistencia a pláticas el que vayan a sembrar un árbol.

“Porque a las pláticas se vienen a dormir y no aprenden nada, mejor que siembren un árbol porque ese servirá para que después su hijo tenga agua”. Además, entre los asistentes que vayan a sembrar un árbol se rifará una pantalla de televisión, que donará el Club Rotario del Valle de Orizaba.

Las 8 mil 500 plantas llegaron a la parroquia el sábado pasado. Y en una fecha que está por definirse se sembrarán en tres comunidades: El Nicho, Chicahuaxtla y Palo Verde, que son las más altas del municipio.

Para saber:

El pino pátula es una especie maderable considerada adecuada para esta zona. Lo que pretende el proyecto es cuidar y mantener el equilibrio ecológico de la región. Lo que hace esta planta es sustituir, sí o sí, a las especies maderables que pasan por mayor deforestación.