Nogales, Ver.- “Manchas” es un amigo peludo color negro y blanco, que tiene un importante trabajo en el organigrama del gobierno de Nogales, pues cuida el Palacio Municipal.
Muy temprano, la mascota pasa lista con los policías preventivos y luego se instala en la puerta principal del edificio gubernamental. El uniformado lo coloca en una silla de plástico y desde ahí vigila quien entra y sale.
“Manchas” llegó hace dos años y medio lleno de roña, pero encontró la mano amiga de los elementos de seguridad que lo curaron y rehabilitaron, porque llegó también con muchas pulgas.
Los vecinos le regalan comida y las secretarias del Ayuntamiento le llevan croquetas con las que lo alimentan. Tres veces a la semana recibe un baño con agua de la Lagua de Nogales.
La rutina de la mascota comienza a las 8 de la mañana, cuando abren las puertas del Palacio Municipal, y se instala en una silla para iniciar su labor de vigilancia acompañando del policía de guardia.
Cuando tiene hambre el perro guardián con su pata toca la pierna al uniformado para que le dé sus croquetas, Su único sueldo es el plato de comida, agua y el cariño de sus cuidadores.
“Manchas” hace recorridos en los pasillos de la planta alta donde quedan los cubículos de los ediles, y a veces vigila en el auditorio. Patrulla el estacionamiento, Tesorería, Registro Civil y las demás oficinas.
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Los fines de semana cuando cierran el Palacio Municipal, la mascota descansa y visita a las familias de los alrededores, que le ofrecen comida y agua fresca. El lunes temprano, nuevamente, está listo en la puerta principal para trabajar.