ORIZABA, Ver.- Reynaldo Olivier Galindo y Marcos Rolando Hernández Vega recibieron esta tarde el Orden del Diaconado, al imponerles las manos del Obispo Eduardo Cervantes Merino y hacer la plegaria de ordenación, durante la celebración Eucarística que presidió en la Catedral de San Miguel Arcángel.
A los jóvenes que concluyeron su formación y comienzan la etapa de inserción, antes de ser ordenados sacerdotes, les recordó que están llamados a configurarse permanentemente con el Señor en el servicio.
“La vocación de los discípulos misioneros de Cristo es el servicio, y los ministerios y diferentes servicios de la Iglesia surgen inspirados por el Espíritu en orden al bien común, es decir, para el bien de la comunidad”, dijo.
Ellos, dijo a la comunidad presente, pondrán su persona con sus capacidades humanas, intelectuales, espirituales y afectivas al servicio de la Iglesia mediante el celibato “y es que no hay otro modo de entregar el corazón entero al Señor” para ser fecundos en la caridad pastoral y estar siempre dispuestos a ir donde Él les pida.
Les recordó que ese ministerio no se puede ejercer con la sola fuerza de la voluntad humana, necesitan la gracia de Dios y la oración constante.
“Busquen permanecer en el proceso discipular. Ser discípulos de modo permanente con los oídos siempre atentos a la voz del Maestro, con los ojos y la mente abiertos para captar sus designios”
Al término de la celebración, el Obispo dijo que los jóvenes diáconos vivirán su etapa de inserción, uno en la Parroquia de Tehuipango y otro, en catedral.