Con 55 años de trayectoria y 63 años que cumplió el Día de los Santos Inocentes, el payaso Menudito no ha podido trabajar porque no hay fiestas y los parques están cerrados, a pesar de eso tiene que “ponerse las pilas” porque al ser papá soltero sus hijos dependen de él.
En entrevista para Diario de Xalapa recuerda que en su natal Coatepec, a la edad de seis años tuvo la oportunidad de entrar al circo Atayde con una moneda que le sustrajo a su abuela, del cual todo le gustó pero se maravilló con los payasos, tanto que desde ese momento supo que quería ser uno de ellos.
A los ocho meses quedó huérfano de madre, por lo que fue criado por sus abuelos, sin embargo el maltrato que sufría le hizo abandonar el hogar antes de cumplir los 9 años para irse a la Ciudad de México en busca de su sueño, ser payaso, lo que logró al trabajar con “Pochito” y “Panchita”, de quienes aprendió el oficio, para después abrirse paso y trabajar con los mejores como Javier y sus marionetas, “Cepillín”, Viruta y Capulina, así como en las caravanas artísticas.
Experto en la globoflexia, Menudito sale a las calles a ofrecer sus creaciones entre las que sobresalen los Santa Claus, pitufos, perritos, flores y diversas formas que salen de sus manos, con los que intenta ganar unos pesos para pagar la renta, el gas, la luz y la comida de sus hijos quienes estudian el mayor una carrera técnica y la niña la secundaria.
El 28 de diciembre, Inocencio Guevara Jácome, mejor conocido como Menudito, cumplió 63 años, los que no pudo celebrar por falta de recursos, lo que también le obligará a no celebrar el año nuevo, pues su hijo quien trabajaba en una pizzería se quedó sin empleo.
En días pasados Menudito organizó a los payasos que no han podido trabajar e hicieron un evento en la calle de Sayago, donde solicitaron recursos económicos y alimentos en apoyo a las familias de los 27 payasos que participaron, sin embargo, el pago de los servicios y alimentos requiere de recursos diariamente, dijo.
La falta de fiestas y eventos le ha llevado a trabajar en los camiones tanto en Xalapa como en el puerto de Veracruz donde ofrece sus globos y hace un pequeño show, gracias al que recoge unas monedas, lo que apenas les alcanza para sobrevivir pero no le ha alcanzado para comprarles a sus hijos una Tablet o una lap top para que puedan aprovechar bien sus clases.
Luego de trabajar muchos años en la Ciudad de México, en los años 80, ya casado decidió regresar a su tierra, donde luego de separarse de su esposa se convirtió en padre soltero de un niño de diez años y con el tiempo regresó su hijita, hoy ve por ambos y trata de darles educación y buen ejemplo al enseñarles a trabajar la globoflexia, sin embargo la pandemia le ha arrebatado las herramientas para poder comprarles sus dispositivos electrónicos para que aprovechen mejor sus clases, por lo cual hizo un llamado a quienes puedan donarle una o dos, quienes podrán estar seguros que serán muy bien aprovechadas porque ambos tienen buenas calificaciones.
Los interesados en apoyar a Menudito, lo pueden encontrar en las redes sociales como payasito Menudito o se pueden comunicar con él al teléfono celular 2288534450.