ORIZABA, Ver.- El historiador y escritor orizabeño Armando López Macip, integrante de la Academia Nacional de Historia y Geografía, pidió al presidente municipal Igor Fidel Rojí López no instalar el Museo de la Inquisición en el exconvento de San José de Gracia pues consideró que el edificio está muy lejos de representar lo que ese museo mostrará, además de que en la ciudad nunca hubo un tribunal del santo oficio.
Como presidente del Comité de Contraloría Social Ciudadana, organismo que vigila el trabajo de rescate del ex convento, reconoció el trabajo que hace la empresa ROEST por gestión de la autoridad municipal, pues el inmueble que construyó Manuel Tolsá es representativo de la Orden Franciscana, por ser uno de los pocos construidos en el sureste de México.
El también autor del libro templo y convento de San José de Gracia pidió a la autoridad recapacitar y no se ponga en ese lugar el Museo de la Inquisición, “en primer lugar, los franciscanos no se dedicaban a eso, los padres fueron muy humildes misioneros que vinieron a evangelizar y a dar caridad al prójimo”, subrayó.
Agregó que en Orizaba nunca hubo Tribunal del Santo Oficio, nombre correcto de la Inquisición, que estuvo, recordó, a cargo de los Dominicos en la Ciudad de México y que tuvo presencia en Puebla y Oaxaca.
Pidió no echar a perder la obra de rescate y restauración de ese inmueble poniendo en él ese museo “porque va en contra de la historia del inmueble. Los orizabeños, que conocen la historia y saben que no estuvo ahí tal vez no les importe, pero los visitantes que tengamos se irán creyendo que en el exconvento se hacían las torturas de la Inquisición”, acotó.
Añadió que si quieren poner el museo lo hagan en el edificio que remodelaron junto al Mercado de Artesanías. “Si ya se hizo la inversión que lo pongan ahí, pero que no se deforme la historia. El inmueble de San José merece que se le dé la dignificación como la tiene el ex Oratorio de San Felipe Neri, que alberga al Museo de Arte del Estado de Veracruz, como lo tiene el Convento Teresiano que es el Colegio Preparatorio y el del Carmen, que es el Obispado; el de San José merece ser un conjunto cultural como el mismo presidente lo ha dicho”.
Apuntó que habrá quienes digan que el Museo de la Inquisición también es cultura, pero eso no va con lo que fue originalmente, pues si se lo arrancaron a los frailes injustamente en 1860, “por lo menos merece que no sea contaminado con la negra historia que nunca tuvo Orizaba, porque nunca tuvo Tribunal del Santo Oficio, aparte de que ese sitio se terminó hasta que México fue Independiente y la Inquisición ya había desaparecido”, concluyó.
