Orizaba, Ver.- "Debido a la pandemia por Covid-19 todos los artistas, incluidos los músicos de la región tuvieron que reinventarse para enfrentar el desafío económico, social y emocional. Como no había fiestas ni bailes, se suspendieron los contratos; pero parece que hay una luz de esperanza con la aplicación de la vacuna. Ya empezaron a abrirse salones de reunión, y poco a poco se reactiva la economía en las altas montañas".
Al señalar lo anterior, el delegado especial de los músicos de la CROC en la zona centro, Aldo Martín Serrano Sánchez, dijo que "impulsar la formación y la preservación del patrimonio musical es tema clave de atención en el municipio de Nogales, por ello, proyectamos la creación de la Escuela de Música con la participación de los agremiados, que tienen la capacidad para impartir diversos talleres a la niñez y juventud", añadió.
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Lamentó que, durante un año y medio, los salones de fiestas y baile estuvieron cerrados, pero ahora, hay empleo porque abrieron y llaman a los músicos, así como a artistas de otros géneros para que amenicen las reuniones; además la mayoría de los filarmónicos está vacunada.
Comentó que la pandemia ocasionó una serie de factores que frenó lo que les gusta y apasiona hacer, a raíz de que se limitó el aforo de conciertos en público y tocadas en salones de fiesta.
"El cantante, mariachi o trío, transmite emociones; a los artistas nos da felicidad hacer lo que hacemos, interactuar y divertir a la gente", añadió.
Agregó que elaboran una base de datos de física y digital para entregar una credencial que los acredite como músicos afiliados a la central obrera.
"Organizados, ayudamos a los músicos desempleados y, a través de las redes sociales les buscamos contratos y mediante gestiones encontramos la forma de que tengan prestaciones sociales. Con la próxima autoridad municipal de Nogales, emprenderemos nuevos retos en beneficio de los afiliados", concluyó.