Orizaba, Ver.- Al menos 200 meseros de Orizaba y municipios de la zona Centro buscan el apoyo de las autoridades municipales para que puedan acceder a recursos económicos y poder mantener a sus familias pues con el cierre de restaurantes y la suspensión de eventos y fiestas, ellos se quedaron sin trabajo.

Este día se manifestaron frente al Palacio de Orizaba y se reunieron con el Director de Desarrollo Económico para plantearle la situación.

Alejandro de la Fuente, en representación de los manifestantes, señaló que sin trabajo y sin dinero para salir adelante están trabajadores, tanto de banquetes como de restaurantes de municipios como Río Blanco y Nogales, quienes tienen como punto de trabajo esta ciudad.

“Es preocupante porque hay familias completas que trabajan como meseros, la mamá, el hijo, el papa; todos se van a trabajar en banquetes y es su única fuente de empleo. Ya llevan más de un mes sin trabajar, porque no hay servicios para los banqueteros, no hay eventos y la gente ya se empieza a desesperar”, subrayó.

Señaló que presentan a las autoridades tres opciones de apoyo para poder subsistir, una es que les den una ayuda económica, otra, que les incluyan en programas emergentes de despensas o que les den trabajo pintando calles o arreglando jardines durante la emergencia, pues el municipio no ha detenido su trabajo.

Consideró que, aunque algunos han optado por vender, por ejemplo, antojitos típicos el ingreso que obtienen también es bajo porque no hay mucha venta; otros realizan trabajos eventuales y lo que obtienen no es suficiente para sostener su economía.

El planteamiento que presentaron a las autoridades locales lo han expuesto en el estado de Puebla y se les dotó de despensas. Esa misma acción buscan concretar en la Ciudad de México.

Finalmente señaló que es preocupante para ese sector que se prolongue más la cuarentena pues son mínimos los lugares que permanecen abiertos, apenas entre un 20 y 30 por ciento y aunque han buscado el apoyo de los empresarios banqueteros, éstos no tienen cómo ayudarlos, porque tampoco tienen trabajo.