Orizaba, Ver.- La violencia vicaria es uno de los tipos más agresivos de maltrato que afrontan muchas mujeres, en cualquier nivel de la sociedad, afirmó Jairo Guarneros Sosa, integrante del Colectivo Feminista Cihuatlahtolli. Dijo también que es el más frecuente.
En entrevista mencionó que la Vicaria va acompañada con las otras formas de violencia. Se le llama así porque utiliza a los hijos e hijas como el medio para amenazar o chantajear a la mujer.
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“Muchas mujeres refieren que no toman la decisión de abandonar a su pareja, porque la primera amenaza que hace es: me voy a llevar a mis hijos y nunca los vas a volver a ver o, cuando finalmente toman la decisión de irse, muchos les quitan a los hijos de manera alevosa, inventan cualquier cosa y promueven ante el juzgado, el depósito judicial de menores, como medida de presión para que la mujer acepte volver con él o se los quita porque dice tener poder o dinero”.
¿Por qué se considera a la violencia vicaria una de las más agresivas?
Consideró que es la más agresiva, porque pueden cambiar muchas cosas en las mujeres, se pueden empoderar, entender que no pueden aceptar la violencia física, emocional etcétera, pero hay algo que desde niñas entienden: que tienen una tarea fundamental en la vida, ser madres. “En este sentido, imagina qué tan fuerte es esa violencia”.
Agregó que ser madres es algo que muchas mujeres no cuestionan, sino que lo asumen de manera natural, y ese es el gran problema, subrayó.
Refirió que el relato de muchas mujeres mayores es que por sus hijos nunca tomaron la decisión de separarse de una relación en la que afrontaban violencia de manera continua. Por eso, la violencia vicaria es muy complicada y difícil para las mujeres.
Enfatizó que hablar de que pase lo que pase la familia tiene que estar unida, no siempre es posible. Hay veces que es mejor que se separen, porque es menos violenta la convivencia; a que sigan en una relación donde lo cotidiano es el maltrato.
Reconoció que hay mujeres que también la utilizan, pero en su gran mayoría son hombres quienes la ejercen en contra de las mujeres. De cada 10 casos de violencia vicaria, estimó que 9 mujeres la padecen y, sólo un hombre la resiente, y dijo ese cálculo es exagerado.
La resienten mujeres de cualquier nivel económico pues se dan casos entre la población indígena, rural, urbana y con una alta capacidad económica.
Guarneros Sosa señaló finalmente, que este tipo de violencia se tiene que sancionar con severidad, para que no se permita utilizar así a los hijos; además de que se tiene que visibilizar, pues apenas se le empieza a considerar como tal.