Orizaba, Ver.- Con la participación de casas vinícolas argentinas, chilenas y mexicanas se prepara el Quinto Festival Entre Vinos y Quesos, que genera en la ciudad una derrama económica de al menos 2.5 millones de pesos, entre prestadores de servicios turísticos.
El emprendedor Héctor Sarmiento, dijo en entrevista telefónica, que este año el festival se llevará a cabo del 1 al 3 de noviembre en el Poliforum Mier y Pesado, tendrá coctelería a base de vino y una exposición de ofrendas, con el propósito también de preservar una de las tradiciones más representativas del país.
“Viene un someliere que preparará ese tipo de coctelería. Si compran su botella les puede preparar los cocteles o enseñarles cómo prepararlo, son bebidas fáciles de hacer”, dijo.
Dijo que a tres años de distancia del primer festival que el gusto por el vino ha ido creciendo, por eso ahora la población de Orizaba no tiene que ir, por ejemplo, a Querétaro o a Boca del Río, para disfrutar de un evento de este tipo.
“Ha ido creciendo y evolucionando el consumo de vino y lo han aceptado bien, les ha llamado la atención que se realicen este tipo de actividades para enriquecer al Pueblo Mágico”, destacó.
Agregó que además de promover la cultura del consumo del vino, que recordó es relajante y ayuda también a mantener una buena salud, siempre y cuando se consuma con moderación, el festival estimula la economía de la ciudad, pues genera una derrama económica de al menos 2.5 millones de pesos.
Turismo llega a Orizaba
Mencionó que Entre Vinos y Quesos atrae a la población no solo de la ciudad, sino de otras ciudades del estado y entidades del país, por lo que tanto hoteles como restaurantes, hostales, estacionamientos y demás prestadores de servicios reactivan su economía.
Recordó que el año pasado, una familia de 12 integrantes visitó la ciudad y fue a ese festival, “se sintieron tan a gusto que decidieron quedarse y buscaron lugar dónde alojarse”. Después de apoyarlos, la familia pudo quedarse y disfrutar su estancia durante los tres días del festival.
Por ello, previendo esa situación, el organizador del festival entabló un convenio con un hotel cerca de la sede del evento, así como con hostales. Así, dijo, todos salen ganando.
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Este año, la sede del festival lucirá diferente, pues habrá ofrendas por la festividad de Fieles Difuntos. La ofrenda principal estará a cargo de los organizadores del evento, pero también empresas, comercios y prestadores de servicios se pueden sumar con una ofrenda.
