Acultzingo, Ver. - El Río Acatla se llevó entre la corriente los zapatos y algunas pertenencias, así como los animales que estaban en la vivienda de Gregoria de Jesús Juárez, una mujer de 70 años, quien junto con su hermana de 89 años y su nieta, salieron de su hogar, viendo como el agua inundaba su vivienda.
Fue a la 1:00 de la mañana de ayer lunes 21 de octubre cuando su nieta la despertó dándole la noticia que se estaba metiendo el agua, “escuchamos, mi nieta se levantó y me dijo que nos estaba entrando el agua, al poco rato, casi todo el río entró a la casa, perdí todo".
La base de su cama, colchones, trastes, ollas, ropa, zapatos, fue lo que se perdió con la inundación cuando el Río de la comunidad de Acatla llegó hasta la casa de Gregoria en Aguaxinola, ambos sitios pertenecientes a Acultzingo.
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Es importante comentar que en una parte de la comunidad de Aguaxinola, existía un puente que cruzaban las familias que estaban del otro lado del río y así podían llegar a sus viviendas o parcelas, pero esta vialidad se cayó con el alza del nivel del agua.
¿En dónde está viviendo la abuelita de Acatla?
Gregoria, vivía al otro lado del puente y tuvo que rodear la comunidad para llegar a la casa de su hija, donde hasta ahora permanece, pues no existe paso hasta su casa, donde permanecen sus cerdos, qué no fueron arrastrados por el agua a comparación de sus totoles, pollos y gallinas.
"Ellos dieron la vuelta para irme a sacar, yo vivo con mi hermana de 89 años y mi nieta… No me dio tiempo rescatar a mis animales más a los que estaban en jaulas y me los traje a casa de mi hija", dijo.
Recuerda que esta es la segunda vez que el río sale de su cauce, pero esta ocasión sí hubo más agua y afectaciones, puesto que la crecida fue de alto nivel, ya que bajo de Soledad Atzompa.
Ella es nacida y crecida en esa casa hecha de madera y aunque afortunadamente la corriente de agua no se llevó la casa, quieren ver que se puede recuperar, porque no han recibido ayuda.
El camino en Aguaxinola en las calles principales está con algunas piedras y ramas, pero, en la zona cercana a la ribera del río Acatla, los charcos de agua con tierra son de gran medida que se deben de rodear para no caminar sobre los mismos.
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El lodo, llena los zapatos de las personas que por ahí pasan buscando llegar a sus casas que si bien no se vieron tan afectadas como la de la entrevistada, la suciedad de lodo todos los días está en sus patios y pisos, ya que no hay otra forma de entrar.
Las clases en el jardín de niños "Benito Juárez García" fueron suspendidas, puesto que la situación del patio no es la adecuada, por el hecho de que aún hay agua y el nivel del lodo alcanza al menos unos 15 centímetros. En cuando a la primaria "Miguel Hidalgo y Costilla" se tuvieron clases para algunos salones.