Córdoba, Ver.- En un 90 por ciento ha bajado flujo migratorio por la zona Córdoba – Orizaba pues su paso únicamente llega a lugares como Tierra Blanca o Coatzacoalcos, dijo Julián Andrés Verónica Fernández, encargado Diocesano de la Pastoral Social y de Movilidad Humana de la diócesis de Córdoba con la agrupación “Vive Migrante”.
Honduras, El Salvador, Nicaragua y Guatemala es de donde proceden al menos 1 o 2 personas que pasan a la semana por la agrupación, se alimentan, se les otorga ropa y servicios médicos en caso de requerirse, la mayoría sigue su camino hacia Estados Unidos, otros al verse muy cansado pueden llegar a quedarse un día.
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Mencionó que la mayoría de quienes buscan el sueño americano viajan solos, no obstante se pueden llegar a topar familias completas con menores de edad que hacen un largo viaje hasta llegar a la frontera con Estados Unidos para lograr cruzar.
El padre Julián Verónica agradeció el apoyo que da la ciudadanía a las parroquias de la diócesis porque eso ayuda a los hermanos migrantes así como a las personas vulnerables que se ubican por el lugar, “últimamente han pasado poco y esto se ha llevado a comunidades de la sierra ayudando a familias con despensas que nos dan de las parroquias y así damos a las personas de escasos recursos de la diócesis”.
Afirmó que la situación de la pandemia, el recorte laboral o el pago mínimo de empleo ha hecho que inclusive los cordobeses dejen la ciudad pero la gente sigue teniendo la solidaridad de ayudar a quienes realmente lo necesitan.
“Los hermanos que han estado ayudando en el corredor del golfo de la provincia eclesiástica de Xalapa que comprende Coatzacoalcos, San Andrés, Tierra Blanca, Córdoba y Orizaba han ayudado, pero a los primeros municipios llegan más migrantes”.
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Recordó que desde antes que la pandemia llegará de lleno a la zona centro del estado, el flujo había ido disminuyendo debido a que esta enfermedad empezó en lugares lejanos a la República Mexicana.
Afortunadamente en lo que va de la pandemia de Coronavirus no han detectado a migrantes con síntomas o contagiados del virus, únicamente la deshidratación y dolor o heridas en los pies son atendidos debido a que los caminos no son fáciles.