Río Orizaba, pese a estar casi seco, todavía existe fauna que se refresca en él [Video]

Una parvada de patos silvestres delatan la agonizante y penosa existencia de lo que antes fuera el gran afluente del río Orizaba

Gabriel Lagos / El Sol de Orizaba

  · jueves 6 de junio de 2024

De marzo a la fecha van tres meses que no llueve en la zona | Foto: Gabriel Lagos | El Sol de Orizaba

Orizaba, Ver.- Y cuando todo parecía que el río Orizaba agoniza, surge la vida, escondidos entre maleza y piedra, refrescándose en un charco de agua, están ellos, una parvada de patos silvestres.

A unos metros de ellos, en lo que fuera el caudal del río, se escucha el escurrimiento de un arroyo, pero no se ve, grandes piedras lo ocultan celosamente entre sus sombras.

¿Cuál es el estado actual del río Orizaba?

Sin embargo, los patos delatan la agonizante y penosa existencia de lo que antes fuera el gran afluente del río Orizaba, y con su presencia, la esperanza del renacer del torrente acuático sigue.

El Sol de Orizaba recorrió el caudal del río hacia Ixhuatlancillo para conocer más detalles de la sequía en este cuerpo acuático, pero el terreno es hostil, de alto riesgo por lo tupido de la maleza, arbustos y piedras.

Algunas rocas son de gran tamaño, que es impensable la forma en cómo llegaron a donde están, y esto hace reflexionar sobre la urgencia de limpiar el caudal antes de lleguen las aguas.

Al renacer el río, todo eso será arrastrado por la corriente y Orizaba sabe que la furia del ahora agonizante afluente es de alto riesgo cuando cobra vida y crece, y lo ha demostrado a lo largo de su historia.

Prueba de ello fue la inundación vivida en agosto de 2012, que dejó a varias víctimas mortales, entre ellos un trabajador del Ayuntamiento en la administración de Hugo Chaín, y más de 200 familias afectadas por el desborde del caudal.

De marzo a la fecha van tres meses que no llueve en la zona; las temperaturas han sido extremas y el majestuoso Pico de Orizaba ya no tiene de donde suministrar agua al río, por lo que la hierba ha crecido desmedidamente al invadir los terrenos en donde corría el agua.

Con o sin agua, el caudal del río Orizaba es un lugar que debe ser tomado en cuenta por las autoridades, no solo para atracción de turistas, sino para mantener con vida a un afluente que mantiene a otros seres.

Una pequeña parvada de patos silvestres se observan sobre una parte del río Orizaba | Foto: Gabriel Lagos | El Sol de Orizaba

El futuro se nota incierto si las autoridades locales, estatales y federales no toman en serio el problema de la deforestación, la contaminación ambiental y el poco mantenimiento a un caudal del río que alimenta a más de 200 mil pobladores de Orizaba y que podría perderse si no se sabe cuidar.