Orizaba, Ver.- Transcurrieron casi tres años de pandemia por Covid-19 y no se tiene conocimiento del avance del VIH-Sida, que sin duda se incrementó en todos los rangos de edad, porque se suspendió la atención y tratamiento de personas diagnosticadas con este padecimiento, aseveró Jairo Guarneros Sosa, integrante del Colectivo Feminista Cihuatlahtolli.
Recordó en entrevista que cuando toda área de salud se volvió espacio Covid se dejaron de atender otras problemáticas, entre ellas el VIH, además de que se dejaron de hacer pruebas y de dar condones; “y esa situación continúa en el estado”.
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El que hace las pruebas de detección rápida es el Grupo Multisectorial y en Córdoba el grupo “Sí a la vida”, pero no se ha medido la consecuencia de haber dejado de atender mucho tiempo el VIH a consecuencia del Covid. “Fueron prácticamente dos años sin atención porque todo estaba enfocado al Covid-19”.
Todavía no se ha visto, insistió, cómo esa falta de atención repercutió en nuevos casos y qué sucedió con los que se estaban atendiendo. La prevención y detección temprana se dejaron de hacer y esa es una problemática que pronto va a estallar”.
Mencionó que si bien hay mayor conocimiento entre la población sobre que en riesgo de contraer VIH están todos, si no ejercen su sexualidad de manera responsable, se debe continuar con las campañas permanentes e insistir en el cuidado de la salud, seguirán apareciendo casos.
“Esto también se dejó de hacer y por eso hubo un retroceso, no solo se estancó, sino que se retrocedió en materia de prevención”, aseveró.
¿Hay desabasto de condones?
Un problema que ahora se afronta es el desabasto de condones, de los que carecen, por ejemplo, en la Jurisdicción Sanitaria VII. “A las trabajadoras sexuales les que van a pedirlos les quieren dar cinco o 10 condones, es absurdo y ridículo que se les quiera dar esa cantidad sabiendo que ellas pueden ser parte de la solución en materia de prevención”.
Resaltó que es a ellas a quienes tiene que darse un mayor número de preservativos para que ejerzan con responsabilidad y protección su actividad, pero también a los jóvenes, a quienes además se les debe proporcionar toda la información necesaria para que ejerzan su sexualidad responsablemente en el momento en que ellos lo decidan.