Acultzingo, Ver. - Los hermanos Hernández, desde niños, vieron a sus padres y abuelos dedicarse al campo y en temporada de Día de Muertos, la flor de cempasúchil fue parte de su corte anual, así como de la venta de esta aromática flor color amarilla, sin embargo, esto ha cambiado.
Valentín y Erasmo Hernández Martínez, se dedican a la siembra de maíz y otros insumos de campo, pero en temporada, continuando con la técnica y tradición de siembra que su abuelo les inculcó, este año se dedicaron al plantar flor de cempasúchil o flor de muerto, que con su aroma y color peculiar dan un toque bonito al paisaje en el que crecen.
Explica que desde julio, la siembra de la flor se da en pequeñas macetas y es hasta que la misma tenga 20 centímetros de altura que se trasplanta en la parcela de tierra antes preparada y es ahí donde empieza su crecimiento y desarrollo.
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Para este crecimiento llegan a pasar aproximadamente tres meses y a finales de octubre se realiza el corte de esta flor para su comercialización, tomando en cuenta que esta ha ido evolucionando.
Siembra de la flor se ha ido perdiendo
Erasmo Hernández, recuerda que cuando niño las personas de la zona se dedicaban a la siembra, el corte y formación del rollo de flor hasta la carga de la misma en caminatas rumbo a uno de los mercados de Orizaba, se apreciaban las montañas de flores; no obstante, de unos años atrás al 2024 esto se ha ido perdiendo por lo que la producción es menor.
Hoy en día, la comercialización de flor es buscada por las personas, quienes compran las líneas de parcelas, es decir, ahora llegan a ellos, lo que esto da un valor más grande a su trabajo en el campo.
En su parcela, menor a una hectárea, a días de empezar el corte de la flor, no toda han floreado y esto se debe a las condiciones del clima frío y lluvia que no permite la maduración de la flor, por lo que confiado en que se llegue a término, esperara con ansias la fecha del 27 de octubre para el corte de su tarea.
El olor a la flor invade el terreno donde Valentín y su hermano sembraron y en la parte trasera de sus viviendas tienen otro pequeño espacio en metros que alberga flor más abierta, sin embargo, a esta le falta maduración.
Cabe hacer mención que al menos en el centro del municipio de Acultzingo, los hermanos Hernández fueron los únicos que hicieron la siembra de flor de muerto, toda vez que los paisajes de siembra se centran en maíz, frijol y ejote.
Factores como el clima son los que hacen que los campesinos decidan si o no realizar la siembra de la flor, pues por el frío y la lluvia esta no madura y pierde productividad y no se vende, lo que les significa dinero quedado.
En cuanto a precios, Valentín Hernández hizo énfasis que la brazada de flor o rollo de un metro de hilo, que es la medida de venta, estará entre los 250 a 350 pesos, toda vez que puede haber escasez porque no hubo suficiente siembra en Acultzingo.
